Experta en reumatología destacó la importancia de replantear las definiciones de remisión en artritis reumatoide y optimizar el uso de los medicamentos disponibles para lograr mejores resultados en los pacientes.
La artritis reumatoide, una enfermedad inflamatoria crónica que afecta las articulaciones, sigue representando un desafío clínico a pesar de los avances terapéuticos.
Por lo mismo, durante el Congreso PANLAR 2025 en Ciudad de México, la Revista Medicina y Salud Pública conversó en exclusiva con la Dra. Janet Pope, reumatóloga que abordó la necesidad urgente de innovar en la forma en que se define y trata esta condición. Desde replantear el concepto de remisión hasta optimizar el uso de medicamentos disponibles.
"Debemos aspirar a la remisión. Más pacientes en remisión significan menos enfermedad cardiovascular, menos morbilidad y mortalidad, mejor calidad de vida e incluso menos infecciones graves y cirugías", enfatizó la Dra. Pope.
Una de las principales problemáticas, explicó, es que aún no existe consenso sobre qué se entiende exactamente por "remisión".
"Cuando pregunto a una audiencia, las respuestas varían. Algunos usan definiciones estandarizadas, otros dependen de su experiencia. Necesitamos remodelar nuestras definiciones", puntualizó la especialista.
La especialista propuso una visión más objetiva de la remisión, similar a cómo otras especialidades abordan enfermedades crónicas.
"Si una biopsia sinovial no muestra inflamación activa y no hay articulaciones inflamadas, yo consideraría que el paciente está en remisión", explicó. Sin embargo, señaló que el problema surge cuando se introduce la percepción del paciente: "La opinión del paciente es muy importante, pero no siempre coincide con la evaluación médica".
Comparó este fenómeno con condiciones como la psoriasis o la enfermedad de Crohn, donde incluso si persisten síntomas crónicos, la enfermedad puede considerarse en remisión si no hay evidencia objetiva de inflamación activa.
Mejor uso de los tratamientos disponibles
Otro aspecto clave de la innovación radica en el tratamiento temprano y efectivo.
"Tenemos muchos medicamentos, pero probablemente no los usamos en el orden óptimo. Debemos tratar temprano, alcanzar la dosis adecuada rápidamente y buscar una remisión profunda y rápida", afirmó la Dra. Pope.
También propuso que los ensayos clínicos pragmáticos en el mundo real, en lugar de suposiciones clínicas, podrían ser el camino para descubrir las mejores combinaciones de tratamientos.
En este sentido, reconoció que incluso las guías actuales, aunque bien intencionadas, a veces obstaculizan un tratamiento más eficiente: "Quizás necesitamos ensayos que carguen el tratamiento intensivo al principio en lugar de seguir un enfoque paso a paso", añadió la experta.
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El rol de la educación en el diagnóstico y tratamiento
Respecto a la valoración de los síntomas por parte de los pacientes, la especialista fue clara: "Lo que el paciente nos dice es importante y respetable, pero si la atribución es incorrecta —si se trata de artrosis, dolor crónico o daño estructural— puede distorsionar nuestra evaluación de la actividad de la enfermedad". Afirmó la Dra. Janet.
Así mismo, recalcó que muchas veces las preguntas de los cuestionarios no están dirigidas específicamente a la artritis reumatoide: "A veces preguntamos sobre la salud general en la última semana o mes, lo cual no se relaciona necesariamente con la actividad de la artritis", explicó en tono crítico.
Consejos para médicos de atención primaria
Finalmente, envió un mensaje importante para médicos de atención primaria, quienes frecuentemente son los primeros en evaluar pacientes con dolor articular:
"Van a ver más artrosis erosiva de manos que artritis reumatoide, pero la incidencia de artritis reumatoide ha aumentado. La edad promedio de aparición ha subido una década. En América Central, es alrededor de los 50 años; en EE.UU. y Europa, 54 a 55 años". Expresó la Dra. Pope.
Recomendó no basar el diagnóstico únicamente en pruebas de laboratorio como CRP o factor reumatoide:
"Si ven hinchazón fija en las articulaciones metacarpofalángicas y descartan gota o condrocalcinosis, consideren referir al reumatólogo. Prefiero ver a un paciente con hinchazón documentada que a uno con solo dolor", concluyó.