El "síndrome del corazón festivo", es una condición que ocurre como resultado del consumo excesivo de alcohol combinado con otros factores como trasnochos, estrés emocional o físico, y, en algunos casos, la ingesta de comidas copiosas.
Durante las festividades de Navidad y Año Nuevo, las muertes relacionadas con falla cardíaca tienden a incrementarse de manera preocupante.
Para abordar este tema, desde la Revista MSP, conversamos con el Dr. Carlos Ortiz, cardiólogo de la fundación cardioinfantil, LaCardio, en Bogotá Colombia, quien explicó los factores principales que inciden en este fenómeno y brindó varias recomendaciones para prevenir complicaciones cardíacas en estas fechas.
"Estamos teniendo cada vez más incidencia de falla cardíaca en los servicios de urgencias", señaló el Dr. Ortiz, quien también explicó que entre las causas están el "aumento de la edad de la población, y aumento de los factores de riesgo que llevan a falla cardíaca, como una presión no controlada, tener sobrepeso, diabetes y consumir alcohol o cigarrillo".
Estos factores "dañan el corazón" y aumentan la probabilidad de desarrollar insuficiencia cardíaca.
Puedes ver la entrevista completa aquí:
El Dr. Ortiz mencionó que, en estas fechas, algunos pacientes descuidan su tratamiento. "Las personas creen que porque se sienten bien pueden dejar de tomar los medicamentos, por ejemplo, para tomarse algunos tragos o para celebrar en familia", explicó. Este descuido puede desencadenar episodios graves de falla cardíaca.
Pero, ¿Qué pasa si por el contrario, en lugar de dejar de tomar medicamentos, los mezclan con las bebidas alcohólicas? "Nosotros como cardiólogos estamos desaconsejando específicamente en pacientes con insuficiencia cardíaca y con arritmias el consumo de alcohol", explica el experto.
"Es posible que las interacciones farmacológicas se vayan a afectar, los medicamentos dejen de actuar, pero lo más importante, es que el exceso de alcohol va a dañar la fibra miocárdica, la fibra del corazón y va a alterar su funcionamiento y peor aún, lo va a ser más propenso a arritmias".
Aunque una copa de vino o un trago de whisky pueden ser tolerables, el exceso puede dañar las fibras del corazón, alterar su funcionamiento y propiciar arritmias, como fibrilación auricular o ventriculares.
Estas arritmias pueden manifestarse con síntomas como taquicardia, latidos irregulares, ahogo o incluso síncopes.
"El principal síntoma es que empieces a tener un corazón como un poco más acelerado y un poco más de taquicardia. Sentirás que el corazón tiene unos latidos irregulares", dice.
"Segundo, que la persona se desmaye. Cuando una persona se desmaya y tiene un problema cardíaco de base como la insuficiencia cardíaca, estamos hablando de un síncope. Puede ser que la arritmia estuvo tan acelerada que llevó al colapso del paciente o lo contrario, el corazón estuvo tan lento e incluso se bloqueó".
"El ahogo y el cansancio es otro síntoma muy importante", explica. Sin embargo, para este factor, también juega un rol importante el exceso en el consumo de alimentos y bebidas.
"Es muy importante que las personas reduzcan un poco el consumo de sal para que esta no vaya al organismo y haga que tenga mayor retención de líquidos y más ahogo esta persona".
Las emociones desempeñan un papel bastante importante en la salud cardiovascular, y, sobre todo, en estas épocas, siendo esencial mantener un equilibrio emocional para preservar el bienestar del corazón.
Episodios de estrés emocional agudo, como la recepción de noticias impactantes, pueden generar respuestas fisiológicas adversas que afectan negativamente la función cardíaca. Ante estas situaciones, resulta crucial adoptar estrategias de regulación emocional que permitan recuperar la estabilidad y mitigar los efectos sobre el sistema cardiovascular.
Por otro lado, el "síndrome del corazón festivo", o síndrome del corazón en "sábado por la noche", es una condición que ocurre como resultado del consumo excesivo de alcohol combinado con otros factores como trasnochos, estrés emocional o físico, y, en algunos casos, la ingesta de comidas copiosas.
Esto también es otro factor que puede provocar alteraciones en el ritmo cardíaco, como fibrilación auricular u otras arritmias, y está asociada con el aumento de la frecuencia cardíaca (taquicardia) y la disminución de la variabilidad de esta frecuencia.
De hecho, el término se originó al observar un incremento en los casos de arritmias cardíacas durante los fines de semana o períodos festivos, cuando es más común excederse en el consumo de alcohol, como navidad y año nuevo.
Para prevenir complicaciones, el Dr. Ortiz recomendó priorizar el cuidado de la salud durante las celebraciones: "Cuando disfrutemos en familia, hagámoslo sanamente, eviten el exceso de alcohol, tengan cuidado con las drogas, por favor no se trasnochen tanto y no coman en exceso".
También recordó la importancia de ser adherentes al tratamiento médico. "Un médico, un especialista, un grupo de salud, no formula un medicamento porque sí. Uno formula un medicamento para buscar un objetivo en salud".
Finalmente, llamó a mantener un estilo de vida saludable incluso durante las vacaciones. Esto incluye dormir entre siete y nueve horas, realizar ejercicio moderado y evitar excesos. "Conoce tu cuerpo, conoce tu corazón y conoce tu salud y mira que no tengas esos excesos", concluyó el Dr. Ortiz.
