Según IMPAS, un 20% de los pacientes no siguen ningún tratamiento para su psoriasis. Además, de los pacientes con una actividad modera-severa, un 17% está sin tratamiento, un 51% en tratamiento tópico y un 4% en fototerapiai.
En el marco del III Congreso Internacional de Psoriasis, la Asociación de Pacientes Acción Psoriasis ha presentado los resultados de la encuesta IMPAS, sobre el impacto de la psoriasis y sus comorbilidades en la calidad de vida, un estudio realizado entre 1.209 pacientes de psoriasis y que cuenta con la colaboración de la compañía biofarmacéutica AbbVie.
El objetivo de esta encuesta, es el de analizar el impacto que la psoriasis tiene en la calidad de vida del paciente, al mismo tiempo que profundizar en la relación de esta enfermedad con sus comorbilidades asociadas.
Según esta encuesta, el 85% de los pacientes encuestados tenía alguna enfermedad asociada a la psoriasis, habiendo aparecido la mayor parte de ellas después del diagnóstico de la misma.
El proceso inflamatorio que se produce en la psoriasis podría estar asociado con el desarrollo de otras enfermedades, las cuales por sí mismas tienen un impacto en la salud y calidad de vida del paciente. A este tipo de enfermedades asociadas también se las denomina comorbilidades.
Observando las comorbilidades más frecuentes, la encuesta muestra que un 31% de los pacientes padece artritis psoriásica, un 30% sobrepeso, un 26% ansiedad, un 15% hipertensión, un 10% depresión, un 5% problemas cardiovasculares, porcentaje que se repite para diabetes y un 3% enfermedad hepáticai.
“El paciente debe saber que la psoriasis es una enfermedad crónica que va a estar presente el resto de su vida. Además, conlleva una serie de comorbilidades asociadas debido a que es una enfermedad del sistema inmunológico y su afectación es global. En este sentido, desde Acción Psoriasis se ha llevado a cabo el estudio IMPAS para poner de manifiesto el impacto de las comorbilidades en los pacientes de psoriasis”, asegura Santiago Alfonso, director de Acción Psoriasis.
Un DLQI grave o muy grave está relacionado con una incidencia más alta en la mayoría de comorbilidades.
El cuestionario DLQI permite medir el índice de calidad de vida de los pacientes dermatológicos. Se trata de la escala más utilizada para medir la calidad de vida en dermatología. En este caso, el cuestionario DLQI se ha realizado sobre los 1.209 pacientes de psoriasis encuestados. Los datos de los cuestionarios DLQI recogidos en IMPAS revelaron que en nuestro país la psoriasis afecta de forma grave o muy grave a la calidad de vida del 22,7% de los pacientes que la padeceni.
Aquellos pacientes en los que la psoriasis afecta de forma grave o muy grave a su calidad de vida presentan una incidencia superior en la mayoría de comorbilidades asociadas respecto al global de pacientes con psoriasis encuestados; con los siguientes resultados: depresión (52%), ansiedad (39%), enfermedad hepática (35%), osteoporosis (28%), sobrepeso (27%) y artritis psoriásica (21%).
En palabras del Dr. Miquel Ribera, dermatólogo, “los últimos estudios nos revelan cómo aquellos pacientes con una psoriasis severa presentan mayor incidencia de comorbilidades. La explicación de estas asociaciones puede basarse en el perfil genético, así como en el componente inflamatorio que conlleva la enfermedad y que causa la resistencia a la insulina. Los especialistas debemos ser conscientes de que la psoriasis es más que una afectación cutánea y que puede conllevar otras enfermedades menos visibles que dificultan enormemente el día a día del paciente”.
Según IMPAS, un 20% de los pacientes no siguen ningún tratamiento para su psoriasis. Además, de los pacientes con una actividad modera-severa, un 17% está sin tratamiento, un 51% en tratamiento tópico y un 4% en fototerapiai.
“Es crítico que el estado inflamatorio de la psoriasis sea diagnosticado a tiempo, de manera que se pueda empezar a tratar al paciente psoriásico lo antes posible”, asegura el Dr. Pablo de la Cueva. “La detección temprana y el tratamiento adecuado de estas enfermedades es importante, dado que podría permitir prevenir su evolución a fases más graves. Por ello, el manejo del paciente con psoriasis debe contemplarse desde un punto de vista integral”, añade.