El cáncer de próstata es una enfermedad en la cual no se presentan síntomas, y se estima que en Puerto Rico 1 de cada 6 hombres, lo padecen, pero no lo saben.
Según la data del Registro Central del Cáncer de Puerto Rico y el Centro Comprensivo de Cáncer de la Universidad de Puerto Rico, la población de la isla tiene una de las tasas más altas de cáncer de próstata en el mundo. Este es el cáncer más frecuente entre los hombres y también es la primera causa de muerte (17 %).
Por si fuera poco, según el Dr. Alvin López Pujals, urólogo en Urology Hub, asegura que en Puerto Rico la tasa de incidencia de cáncer de próstata es de “1 en 6, y en el historial familiar es 1 de cada 3”, es decir, que en personas que tienen historial familiar sobre este cáncer, uno de cada tres va a repetir la enfermedad.
Este es un asunto inevitable en los hombres
En una conversación que sostuvo el experto con la Revista de Medicina y Salud Pública sobre los síntomas y factores de riesgo del cáncer de próstata, asegura que la enfermedad es un tema al que poca atención se ha prestado. Además, es una condición que no presenta señales inmediatas, por lo tanto la detección se hace compleja de modo que, de momento, se cuenta con dos métodos de discernimiento: la prueba de PSA (Antígeno Prostático Específico) y el examen rectal.
Asimismo, explica el Dr. López que los factores de riesgo más altos a los que la población masculina se encuentra expuesta son “la genética, el historial familiar tanto de crecimiento prostático que traiga síntomas, como de crecimiento prostático que puede causar mutaciones que den eventualmente cáncer”.
Además, agrega el experto que “en términos de factores de riesgo, ser varón es el factor de riesgo que todo el mundo va a tener. Desde el punto de vista de los factores de riesgo más importantes va a ser el historial familiar, la edad es el otro factor de riesgo más importante ya que a medida que aumenten los años, va a ser más prevalente la presencia de cáncer de próstata”.
La próstata, al ser una glándula, tiende a crecer con los años y por ello es que la edad es un factor de riesgo considerable: “nos empieza a crecer cuando tenemos como 30 años, y no va a parar de crecer hasta que uno se muere. Así que si todo el mundo tuviera 150 años, la próstata de todo el mundo sería un melón y todo el mundo tendría cáncer”, asegura López.
Detección de cáncer de próstata: prueba PSA y examen rectal
Basados en varios estudios e investigaciones, en los años 80 se empezó a asociar la prueba de PSA como activo en la detección de cáncer de próstata, comenta el doctor López que en aquel tiempo las personas se presentaban al chequeo y en aquel momento era tardío el diagnóstico: “se descubría que el 66 % se presentaban con cáncer de próstata avanzado porque no lo sabían. No había una prueba de discernimiento porque no había síntomas”, explica.
Si bien es cierto que el examen rectal es incómodo, junto con la prueba de PSA, se ha podido establecer un avance en el diagnóstico temprano del cáncer de próstata. No obstante, afirma López que: “se obtiene cerca de un 60 y pico por ciento de pacientes con cáncer de próstata. La sensibilidad y la especificidad es bajita con ambas pruebas. Eso significa que va a haber 30 % de la gente que se va a chequear con el urólogo y que va a tener cáncer de próstata, y va a tener un examen rectal normal y una prueba de PSA normal”, enfatiza.
Sin embargo, de momento son la mejor alternativa con la que cuenta tanto cuerpo médico como pacientes: “nos tenemos que dejar llevar por esas pruebas que por lo menos, pueden ayudar a discernir entre la gente que tenga más riesgo de cáncer de próstata”, agrega que “si uno se hace solamente la prueba de sangre (PSA), la posibilidad de tener cáncer de próstata y que uno lo sepa es cerca del 50 %”, dice.
La mayor población en riesgo es el adulto mayor
En Estados Unidos se estaba utilizando la medida de 45 y 50 años para empezar las pruebas de PSA, la incidencia de cáncer de próstata es de 1 en 11; en la población latina es de 1 en 8, en suelo estadounidense, según comenta López. Agrega que esto es debido “porque tenemos unos factores de riesgo, ya sean genéticos o de raza, que van a aumentar”, dice.
Según estudios y lo que comenta el experto, en Puerto Rico la incidencia es de 1 en 6, y basados en el historial familiar ese margen se reduce a 1 de cada 3: “Es decir, que las personas que tienen historial familiar de cáncer de próstata, uno de cada tres va a repetir cáncer de próstata. En esa población de alto riesgo se recomienda que a partir de los 40 años se empiecen las pruebas de scream”, aclara.
¿La estadística ha mejorado o ha empeorado? ¿Qué sabemos de la incidencia?
“La incidencia ha aumentado, pero la mortalidad ha disminuido. Hoy en día la sobrevivencia de un paciente de cáncer de próstata es de un 96 %. En realidad, si se descubre a tiempo, la sobrevida es alta, a cinco años; pero nosotros tenemos que entender que hay que diagnosticarla a tiempo y que es un tema de todos”, aclara López.
Comenta el experto que se hizo un estudio de autopsia en pacientes de 80 años o más, en el que se evidenció que el 80 % de los pacientes tenían cáncer de próstata y murieron de otra complicación: “eso hace que sea interesante porque no todos los cánceres necesitan tratamiento, pero todos necesitan diagnóstico”, manifiesta.
Es decir, las investigaciones reafirman que la detección temprana es la mejor estrategia con la que se cuenta ante este cáncer que es tan agresivo en la población masculina.
Falta interés y atención en la población masculina
El doctor López asegura que hace falta interés y preocupación en la población masculina de la isla, porque: “el cáncer de seno para las mujeres es el cáncer número 1, en nosotros los varones el cáncer de próstata en términos de mortalidad; en términos de incidencia es el número 2”, enfatiza.
Investigación en la actualidad
Asegura el urólogo que “hoy en día se están haciendo muchas pruebas que van a optimizar ese chequeo para discernimiento”, dice. A lo cual agrega que se adelantan investigaciones en el que la orina se tiene de base para encontrar allí patógenos de cáncer de próstata, mejorando la detección y comodidad de los pacientes que evitan el examen rectal.
Es decir, la idea es que: “con una sola muestra de orina se pueda recolectar y evaluar el material genético y obtener un porcentaje más alto en esa prueba de discernimiento, sobre el 90 % tanto en sensitividad como en especificidad. Es decir, que a lo mejor en el futuro vamos a tener una muestra de orina que pueda sustituir estas cosas”, aclara López.
Sin embargo, hace énfasis en que la prueba de PSA y el examen rectal son la mejor alternativa de momento.
Preocupación gubernamental
Ahora, un detalle no menor que relata el doctor López, es cuando Obama fue presidente de los EE.UU., momento en el cual se llegaron a hacer diferentes estudios porque: “se gastaban cerca de un trillón de dólares en pruebas de discernimiento en muchos cánceres, y cuando llegaron a hacer el estudio sobre el PSA, la conclusión de ellos es que el PSA no tenía un uso de tanto peso para diagnosticar cáncer de próstata, precisamente por la pobre especificidad y la pobre sensibilidad”, afirma.
Esto se debe a que el organismo tiene diversas reacciones y la prueba puede variar, a pesar de servir como indicador: “hay muchas personas que van a tener PSA elevado que no tienen cáncer de próstata, y van a haber muchas personas con cáncer de próstata con PSA bajito; pero es lo único que tenemos para tratar de diagnosticar a la gente a tiempo (…) Es importante visitar al urólogo y hacerse las pruebas pertinentes porque es eso o presentarse en esas estadísticas del 60 y pico por ciento que se presentan con cáncer avanzado”, enfatiza López.
Cáncer de próstata: así se desarrolla la enfermedad
Sin embargo, es fundamental comprender en primera instancia lo que es la próstata y el cómo se desarrolla la enfermedad. “La próstata es un órgano importante en el cuerpo de los barones porque permite que se produzca una sustancia que se llama PSA (Antígeno Prostático Específico), el cual sirve para licuar el eyaculado, que a su vez, cuando cae en el tracto femenino ayuda a los espermatozoides que necesitan ‘nadar’ para poder llegar a fecundar el óvulo, y sin próstata no hay PSA”, explica.
En palabras del doctor López: “Anatómicamente, la próstata es como una dona. Si tratamos de ver cómo es la anatomía, la vejiga es como si uno infla un globo, y el nudo sería la uretra que se estira, y si nosotros cogemos una dona y la insertamos por la uretra llega hasta el cuello de la vejiga, y ahí es donde se encuentra la próstata. Por eso la próstata, en donde está, cuando aumenta en tamaño, puede ocluir o tapar el camino de la orina, y al apretar la uretra nos trae síntomas urinarios y problemas para uno poder ir al baño, orinar, vaciar y demás cuando crece y a todo el mundo le va a crecer la próstata”, dice.
Evite los excesos
“Realmente la dieta no tiene que ver, se presume o se trata de ayudar a buscar diferentes dietas, cosas que puedan ayudar a prevenir o a controlar el crecimiento de la próstata. La dieta que pueda hacer bien al corazón, es casi la dieta que se recomienda para efectos de la próstata”, asegura el doctor López.
No obstante, es claro al explicar que “en realidad no es que va a tener un efecto directo, pero antioxidantes, licopenes, zinc, tener una dieta saludable en términos de colesterol y hacer ejercicio son las cosas que se recomiendan para tener un estilo de vida saludable que pueda ayudarlo a tener una buena salud prostática y no va a evitar el crecimiento del cáncer”, dice.
Asimismo, aclara que el consumo de alcohol y cigarrillo no va a tener que ver: “el cigarrillo afecta muchos tipos de cáncer en términos de incidencia, pero en términos de cáncer de próstata, el uso de cigarrillo no va a tener un efecto sobre eso”, concluye.
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