Descubren que un fármaco para la osteoporosis podría tratar la miocardiopatía dilatada, según estudio

Investigadores han hecho un sorprendente hallazgo al descubrir que un medicamento aprobado para la osteoporosis podría ser útil para tratar la miocardiopatía dilatada (MCD), una rara enfermedad cardíaca causada por mutaciones genéticas.

Laura Guio

    Descubren que un fármaco para la osteoporosis podría tratar la miocardiopatía dilatada, según estudio

    La miocardiopatía dilatada (MCD) es un grupo de trastornos cardíacos graves que afectan principalmente a niños y adultos jóvenes, y se caracteriza por un debilitamiento del corazón, que pierde su capacidad para bombear sangre de manera eficiente. 

    Esta enfermedad puede provocar complicaciones severas, como insuficiencia cardíaca, y en algunos casos, la muerte prematura.

     A pesar de ser una condición rara, se estima que hasta un 40% de los casos de MCD están vinculados a mutaciones genéticas que afectan proteínas clave en el funcionamiento del corazón.

    Dado que la MCD afecta a una pequeña porción de la población, la investigación sobre esta enfermedad ha recibido poco financiamiento, y los tratamientos disponibles son limitados. Sin embargo, un equipo de científicos de la Universidad de Arizona, liderado por el Dr. Sadek, ha adoptado un enfoque diferente. 

    En lugar de tratar de desarrollar nuevos medicamentos desde cero, el equipo decidió investigar fármacos ya aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU. (FDA) para otras afecciones. 

    "Podemos tomar un medicamento que está aprobado para otra afección y usarlo para tratar algunas de estas mutaciones raras", afirmó el Dr. Sadek, destacando las ventajas de utilizar medicamentos ya validados, lo que acelera enormemente el proceso y reduce costos.

    El reto de corregir proteínas defectuosas

    La clave para entender este avance radica en cómo las mutaciones genéticas afectan las proteínas del corazón. El corazón humano funciona gracias a un complejo sistema de proteínas que trabajan en conjunto para mantener el ritmo y la fuerza del latido. 

    Cuando una de estas proteínas se ve alterada por una mutación, puede afectar gravemente el funcionamiento del órgano.

    En el caso específico de la miocardiopatía dilatada, la mutación más común identificada hasta el momento es la K210del, una alteración genética que cambia la estructura de una proteína crucial en el sistema de bombeo del corazón.

     El equipo de la Universidad de Arizona decidió centrarse en cómo esta proteína mutada podría ser restaurada a su forma funcional. Para ello, crearon un modelo 3D de la proteína K210del, comparándola con su forma normal para comprender cómo la deformación afecta su interacción con otras proteínas y cómo esto contribuye al fallo cardíaco.

    Risedronato: el medicamento inesperado

    Para encontrar un tratamiento potencial, los investigadores recurrieron a la inteligencia artificial y a poderosos modelos de simulación computacional. Examinando más de 2000 fármacos aprobados por la FDA, el equipo buscó aquellos que pudieran interactuar con la proteína mutante y devolverle su forma normal.

     De todos los medicamentos evaluados, sorprendentemente, solo un pequeño número cumplió con los criterios. De esos, el risedronato, un medicamento comúnmente utilizado para tratar la osteoporosis, emergió como el más prometedor.

    El risedronato es un bisfosfonato, un tipo de medicamento que generalmente se utiliza para prevenir la pérdida ósea en pacientes con osteoporosis

    Aunque este fármaco no estaba diseñado para tratar enfermedades cardíacas, en los experimentos con modelos celulares y animales, mostró una capacidad única para corregir la forma de la proteína mutante asociada a la MCD, restaurando la función normal del corazón.

    Próximos pasos: Ensayos clínicos y colaboración internacional

    Con estos resultados alentadores en modelos animales, el equipo de la Universidad de Arizona ahora se prepara para llevar su investigación a la siguiente fase: los ensayos clínicos en humanos. 

    Para ello, han iniciado una colaboración con el Centro Nacional de Investigación Cardiovascular en España, donde se evaluará la eficacia del risedronato en pacientes humanos portadores de la mutación K210del, la más comúnmente asociada con la MCD.

    A la par, el equipo está trabajando en el diseño de un ensayo clínico más amplio que se llevará a cabo en el Centro Cardíaco Sarver, con el objetivo de determinar la seguridad y efectividad del risedronato en un grupo más diverso de pacientes con esta condición genética. Si estos ensayos resultan exitosos, el medicamento podría ser aprobado para tratar una forma rara y debilitante de la enfermedad cardíaca.


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