Se fundamenta en la premisa de que, en pacientes con tumores, tanto las células como el ADN tumoral terminan llegando al torrente sanguíneo. Esto lleva a la posibilidad de que, mediante una prueba de sangre, se pueda detectar el cáncer.
En el evento NaviSalud en Plaza Las Américas, la doctora Normarie Herrera, patóloga clínica y directora del laboratorio HRP, compartió detalles sobre los avances en el diagnóstico de cáncer mediante pruebas de sangre.
Este proceso, conocido como biopsia líquida, estaría revolucionando la detección e incluso el manejo de esta enfermedad, aunque aún enfrenta retos mayores.
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Para entrar en contexto, la Dra. Herrera, explicó que los patólogos clínicos desempeñan un rol bastante importante en la medicina moderna al servir de enlace entre los médicos y los laboratorios.
"Nosotros como patólogos clínicos funcionamos como directores de laboratorios... Somos ese enlace entre lo que son los clínicos y los pacientes", comentó, añadiendo que su trabajo incluye guiar a los médicos en la selección y uso de pruebas avanzadas para mejorar los diagnósticos.
La experta comentó que, aunque las biopsias líquidas todavía están en etapas iniciales, son una herramienta clave para detectar cáncer a partir de marcadores moleculares presentes en la sangre.
"Lo que busca la biopsia líquida realmente se basa en esta idea de que cuando un paciente tiene algún tumor, las células o DNA del tumor, eventualmente llegan al torrente sanguíneo", explicó. "De ahí parte la idea de que entonces hacer una prueba sanguínea, puede detectar el cáncer".
Estas pruebas han mostrado mayor desarrollo en ciertos tipos de cáncer, "como el de pulmón, mama y próstata, debido al extenso estudio de sus perfiles moleculares".
Sin embargo, la patóloga aclaró que actualmente estas técnicas "funcionan más bien como un apoyo al diagnóstico", en lugar de ser definitivas. Añadió que "son bien pocas las pruebas hoy en día validadas como para hacer un diagnóstico oficial".
A pesar de sus ventajas, las biopsias líquidas presentan algunos retos técnicos y de accesibilidad. Según la experta, "lamentablemente, al depender de cantidades tan pequeñas detectables en la sangre, tiene limitaciones de sensibilidad todavía".
Además, mencionó que estas pruebas "hoy en día se encuentran un poco costosas", restringiendo su disponibilidad en laboratorios de acceso general.
La Dra. Herrera recomendó comenzar con pruebas de rutina accesibles, como hemogramas y paneles de química básica. "Hay muchísimas pruebas de rutina... estas son pruebas de screening que a veces los pacientes tienen de primeras", indicó.
Además, alentó a los médicos a comunicarse con los patólogos clínicos para explorar pruebas avanzadas, incluso aquellas que requieren envío a laboratorios especializados fuera del país.
"Puedo hablar del laboratorio de HRP. Hacemos las gestiones de buscarle opciones, si es posible quizás enviarle esa prueba, aunque se tenga que enviar a Estados Unidos, por ejemplo. Pero ayudar al clínico a buscar esas alternativas es importante porque entonces lo van a llevar a un diagnóstico acertado para el paciente.
La doctora concluyó diciendo que el avance en el diagnóstico de cáncer depende de una comunicación eficaz entre pacientes, médicos y laboratorios.
"Muchas de las consultas que se nos hacen son médicos haciéndonos preguntas de prueba o solicitando pruebas adicionales. Y pienso que es un punto bien clave para que los laboratorios puedan avanzar y puedan traer estas pruebas que le hacen falta a la población", afirmó.
