El cuidado de la alimentación en la infancia es un tema de suma relevancia que se refleja en la salud y el bienestar de las personas a futuro.
La malnutrición sigue siendo uno de los problemas de salud pública más graves a nivel mundial, afectando a millones de personas de todas las edades. Esta condición no solo implica la falta de acceso a alimentos suficientes, sino también la carencia de nutrientes esenciales en personas que sí tienen acceso a alimentos, lo que lleva a una serie de complicaciones de salud, desde el retraso en el crecimiento infantil hasta enfermedades crónicas en adultos.
Para profundizar en este tema, conversamos con la licenciada Olga Sinigaglia, nutricionista y dietista certificada, consultora de la Organización Panamericana de la Salud y nos explica el papel clave de la nutrición en la infancia e incluso, desde antes de la concepción.
La Lcda. Sinigaglia explica que "la nutrición en la infancia tiene un impacto que trasciende a lo largo de toda la vida, desde la gestación hasta la edad adulta y el envejecimiento", de igual manera, destaca la importancia de la lactancia materna como un aporte nutricional incomparable para los bebés, brindándoles no solo nutrientes esenciales, sino también protección contra "enfermedades y un vínculo emocional invaluable".
Menciona que es importante no pasar por alto la preconcepción, asegurándose de que la madre tenga un peso saludable y pueda alimentarse de manera adecuada, lo que, indiscriminadamente, contribuye a la formación óptima del bebé y una posterior lactancia eficaz: "La lactancia materna, es un aspecto crucial para proporcionar los anticuerpos que el bebé necesita, ya que son únicos. La leche materna es un líquido vivo que no solo brinda nutrición, sino también amor", enfatizó la nutricionista.
La lactancia continúa hasta que tanto la madre como el bebé decidan hasta cuándo. La nutrición que proporciona va más allá de todo el ciclo de vida. Luego, a los 6 meses, se espera que comience la alimentación complementaria. Si el bebé cumple con esta etapa, se enseña a toda la familia sobre una alimentación saludable, lo que ayuda a establecer patrones alimentarios adecuados a lo largo del ciclo de vida y contribuye a la prevención de enfermedades crónicas.
Para la Lcda. Sinigaglia es "importante destacar que esta atención a la alimentación comienza justo antes de que una pareja intenta concebir, asegurándose de brindar una buena nutrición para el futuro bebé".
Además, señala que la alimentación complementaria a partir de los 6 meses debe ser saludable y adaptarse a los patrones de alimentación de toda la familia, promoviendo el consumo de alimentos de origen vegetal y minimizando el protagonismo de los alimentos procesados y de origen animal. "Esta estrategia contribuye a establecer hábitos alimentarios saludables que pueden prevenir enfermedades crónicas en el futuro", explicó la experta.
