Los pacientes que consumen dietas ricas en alimentos ultraprocesados, tienen niveles elevados de inflamación en su cuerpo, contribuyendo no solo al cáncer, sino a enfermedades crónicas como el alzhéimer y trastornos cardiovasculares.
El estudio, realizado por la Universidad del Sur de Florida (USF) y el Instituto Oncológico del Hospital General de Tampa descubrió un vínculo entre los alimentos ultraprocesados y el cáncer colorrectal.
Según los investigadores, la dieta occidental, rica en alimentos ultraprocesados y caracterizada por un alto consumo de azúcares añadidos, grasas saturadas, aceites de semillas inflamatorios y productos químicos, podría ser un factor clave en el desarrollo de este tipo de cáncer.
El Dr. William Yeatman, un reconocido médico y profesor de cirugía en la Facultad de Medicina de la USF, explica que la inflamación sistemática provocada por una dieta poco saludable no solo afecta el cuerpo en general, sino que tiene influencia directa en los tumores.
"Lo que hemos observado es que la inflamación ahora está presente dentro de los propios tumores de colon, lo que sugiere que el cáncer puede verse impulsado por un ambiente inflamatorio continuo", comentó Yeatman.
Este tipo de inflamación, relacionada con la dieta, podría interferir con los procesos naturales de reparación celular y obstaculizar la respuesta inmunológica, facilitando la progresión del cáncer.
Este enfoque va encaminado a la comprensión de la inflamación crónica y su papel principal en muchas enfermedades, incluido el cáncer.
Los investigadores hallaron que el consumo de alimentos ultraprocesados desencadena un aumento de moléculas inflamatorias que interrumpen el sistema inmunológico y favorecen el crecimiento tumoral.
Además, estas moléculas pueden generar un ambiente en el que el cuerpo se vuelve menos capaz de luchar contra el cáncer, ya que las células tumorales se benefician de la inflamación constante.
El Dr. Ganes, miembro del Programa de Biología del Cáncer en el Instituto Oncológico de la USF, agrega que el cuerpo humano está diseñado para resolver la inflamación a través de alimentos antiinflamatorios, como los que contienen grasas saludables derivadas de fuentes naturales como el aguacate y el aceite de oliva.
Sin embargo, el consumo excesivo de alimentos procesados, cargados de grasas saturadas y aceites inflamatorios, puede sabotear estos procesos curativos naturales.
De hecho, los pacientes que consumen dietas ricas en alimentos ultraprocesados tienen niveles elevados de inflamación en su cuerpo, lo que puede contribuir no solo al cáncer colorrectal, sino también a enfermedades crónicas como el Alzheimer y trastornos cardiovasculares.
"Al reducir la inflamación con alimentos adecuados, podemos potenciar el sistema inmunológico y cambiar el microambiente tumoral", explica el Dr. Yeatman.
Esto sugiere que, al abordar la inflamación crónica mediante alimentos naturales, podríamos mejorar las respuestas del cuerpo ante el cáncer y otras enfermedades inflamatorias.
Esto se conoce como "la medicina de resolución" la cual podría mostrar otra forma en que se podría tratar el cáncer colorrectal.
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