Los pacientes presentan un fuerte dolor y en casos graves, la pérdida de flujo sanguíneo hacia los intestinos daña el tejido y puede, eventualmente, ocasionar la muerte.
La isquemia intestinal es una condición clínica bastante grave, que puede afectar el intestino delgado o intestino grueso, de hecho, hay pacientes que pueden presentarla en ambos.
Ahora bien, la isquemia intestinal ocurre cuando el flujo sanguíneo que llega a los intestinos disminuye, la afección puede deberse a una obstrucción total o parcial de un vaso sanguíneo, usualmente ocurre en una arteria, o a una presión arterial baja que provoca una reducción general del flujo sanguíneo.
¿Cómo ocurre la isquemia intestinal?
Cuando se produce una isquemia intestinal, la disminución del flujo sanguíneo no proporciona suficiente oxígeno a las células del sistema digestivo, causando dolor y haciendo que los intestinos tengan dificultad para funcionar correctamente. En casos graves, la pérdida de flujo sanguíneo hacia los intestinos daña el tejido intestinal y puede ocasionar la muerte.
¿Cómo detectarla?
En algunos casos, la única manera de detectar la isquemia intestinal es con un procedimiento quirúrgico, sin embargo, existen pruebas de cernimiento que pueden ayudar a hallar la afección como incremento del ácido en el torrente sanguíneo (acidosis láctica), angiografía, tomografía computarizada del abdomen y ecografía Doppler de abdomen.
Síntomas
Existen dos clases de isquemia intestinal que pueden ocurrir, isquemia intestinal aguda (repentina) y la isquemia intestinal de evolución progresiva (crónica), dependiendo de cual ocurra, se presentan los síntomas.
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Síntomas de la isquemia intestinal aguda
En la mayoría de los casos, los pacientes que sufren de una isquemia intestinal aguda pueden presentar los siguientes síntomas como dolor abdominal repentino que puede ser leve, moderado o intenso, necesidad imperiosa de defecar, evacuaciones intestinales frecuentes y con fuerza, sensibilidad o distensión abdominales, sangre en las heces, náuseas y vómitos, confusión mental en adultos mayores.
Síntomas de isquemia intestinal de evolución progresiva (crónica)
Por otra parte, algunos de los signos y síntomas de isquemia intestinal crónica pueden ser, calambres abdominales o sensación de estar satisfecho, en general dentro de los 30 minutos después de comer, que puede durar de 1 a 3 horas, dolor abdominal que empeora progresivamente en el curso de semanas o meses, miedo a comer debido al dolor posterior, pérdida de peso involuntaria, diarrea, hinchazón abdominal, náuseas y vómitos.
Tipos de isquemia intestinal
Isquemia de colon (colitis isquémica): Es el tipo de isquemia intestinal más frecuente, ocurre cuando disminuye o se obstruye el flujo de sangre a una parte del colon.
Isquemia mesentérica aguda: Este tipo de isquemia se produce cuando las arterias estrechas o bloqueadas restringen el flujo sanguíneo al intestino delgado. Un flujo de sangre disminuido puede dañar permanentemente el intestino delgado.
Isquemia mesentérica crónica: Este tipo, también conocido como angina intestinal, es el resultado de la acumulación de depósitos grasos en las paredes arteriales (arteriosclerosis). El proceso de la enfermedad suele ser gradual, provoca una disminución del flujo sanguíneo a los intestinos después de comer.
Isquemia debida a trombosis venosa mesentérica: Esta isquemia ocurre cuando la sangre no puede salir del intestino delgado. Puede formarse un coágulo de sangre en una vena que drena la sangre de los intestinos, cuando la vena es obstruida, la sangre retrocede hacia los intestinos, lo que provoca hinchazón y sangrado.
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Factores de riesgo
Ahora, hay varios factores de riesgo que aumentan las posibilidades de sufrir un isquemia intestinal, los cuales pueden ser:
Acumulación de depósitos de grasa en las arterias o aterosclerosis: Los pacientes que sufren de esta condición, tienen mayor riesgo de presentar isquemia intestinal, ya que la disminución de flujo sanguíneo es una de las características de esta enfermedad.
Edad: Las personas mayores de 50 años tienen más probabilidades de desarrollar la enfermedad.
Fumar: Los cigarrillos y otras formas de fumar tabaco aumentan los riesgos de sufrir isquemia intestinal.
Problemas del corazón y de los vasos sanguíneos: Las afecciones de la circulación sanguínea que causan irritación e inflamación de las venas y las arterias también pueden ser un riesgo.
Medicamentos: Entre ellos pueden incluirse las píldoras anticonceptivas y los medicamentos que provocan que los vasos sanguíneos se dilaten o contraigan, como determinados medicamentos para las alergias o para la migraña.
Problemas de coagulación sanguínea: Las enfermedades y las afecciones que aumentan el riesgo de que se formen coágulos sanguíneos pueden aumentar el riesgo de padecer isquemia intestinal.
Otras condiciones médicas: Por ejemplo, tener hipertensión arterial, diabetes o colesterol alto también aumenta el riesgo de isquemia intestinal.
Consumo de drogas recreativas: El consumo de cocaína y metanfetamina se ha asociado a la isquemia intestinal.
Los expertos recalcan que al presentar varios de los síntomas, el paciente debe ocurrir con inmediatez al médico, para poder recibir un pronto tratamiento, hay que recalcar que esta enfermedad es realmente grave, tanto, que puede ocasionar la muerte.
Fuentes consultadas aquí y aquí.
