Se usa ampliamente como un supresor de la tos debido a su buena biodisponibilidad y menor incidencia de efectos secundarios.
La codeína es un agonista opiáceo, similar a otros derivados de fenantreno como la morfina, tiene menos actividad analgésica, y tiene menos efectos secundarios que la morfina, incluyendo la depresión respiratoria, pero es un agente antitusivo más eficaz.
La codeína tiene una alta biodisponibilidad oral similar a las del levorfanol, oxicodona, y metadona. Por vía oral, la codeína muestra una actividad dos tercios de la que exhibe por vía parenteral.
¿Para qué condiciones o enfermedades se prescribe este medicamento?
La codeína pertenece a una clase de medicamentos que se llaman analgésicos opiáceos (narcóticos) y a una clase de medicamentos que se llaman antitusivos. Cuando la codeína se usa para tratar el dolor leve a moderado, cambiando la manera en que el cerebro y el sistema nervioso responden al dolor.
También se usa, en combinación con otros medicamentos, como supresor de la tos debido a su buena biodisponibilidad y menor incidencia de efectos secundarios en las dosis antitusivas, en comparación con la morfina.
Cabe resaltar que este medicamento ayuda a aliviar los síntomas, pero no trata la causa de los síntomas ni acelera la recuperación.
Mecanismo de acción
La codeína es un agonista opiáceo débil en el SNC. La actividad analgésica de la codeína es debida a su conversión a la morfina. Los receptores de opiáceos están acoplados con la proteína-G ( proteína de unión al nucleótido de guanina) de unión ) y funcionan como moduladores, tanto positivos como negativos, de la transmisión sináptica a través de proteínas G que activan proteínas efectoras.
Los opiáceos no alteran el umbral de dolor de las terminaciones nerviosas aferentes a estímulos nocivos, ni afectan a la conductancia de los impulsos a lo largo de los nervios periféricos.
Los opioides actúan como agonistas de los receptores k cerrando los canales de potasio voltaje-dependientes y abriendo los canales de potasio calcio-dependientes (agonistas de los receptores m y d) lo que ocasiona una hiperpolarización y una reducción de la excitabilidad de la neurona.
Efectos secundarios
La codeína puede ocasionar efectos secundarios como: dolor de cabeza, dolor de estómago
y dificultad para orinar.
Algunos efectos secundarios pueden ser graves, por los cuales se debe dejar de tomar la codeína y llamar a al médico inmediatamente o buscar atención médica de emergencia:
Agitación.
Alucinaciones (ver cosas o escuchar voces que no existen).
Fiebre.
Sudoración.
Confusión.
Temblores
Espasmos o rigidez muscular intensa.
Pérdida de coordinación.
Náusea.
Vómitos o diarrea
Falta de apetito, debilidad o mareos
incapacidad para lograr o mantener una erección
Menstruación irregular
Menos deseo sexual
Respiración ruidosa o poco profunda
Dificultad para respirar o tragar
Cambios en el ritmo cardiaco
Sarpullido
Picazón
Urticaria
Cambios en la visión
Convulsiones
Cabe resaltar que la interrupción brusca del tratamiento prolongado puede dar lugar a síntomas de abstinencia. Los pacientes deben disminuir gradualmente las dosis, para evitar esta reacción. En general, una reducción del 50% cada 1-2 días de la dosis diaria es suficiente para prevenir los síntomas de abstinencia en pacientes que han estado recibiendo grandes dosis de codeína.
Dosis según tratamiento
Para el tratamiento del dolor dolor leve a moderado tales como artralgia, dolor de espalda, dolor de huesos, dolor dental, dolor de cabeza, migraña, mialgia y dolor quirúrgico:
Administración oral:
Administración parenteral:
Para el tratamiento de la tos no productiva:
Administración oral:
Cabe resaltar que este medicamento debe suministrarse tal y como sugiere el medico, ya que puede causar adicción en los pacientes.
Fuentes de consulta aquí y aquí