El omeprazol actúa reduciendo la producción de ácido en el estómago, lo que disminuye la irritación y permite la cicatrización de las lesiones
El omeprazol es un medicamento ampliamente utilizado para tratar diversas afecciones estomacales asociadas con la producción excesiva de ácido gástrico. Entre las patologías que se tratan con este fármaco se encuentran el reflujo gastroesofágico, el síndrome de Zollinger-Ellison, la aparición de úlceras en el estómago o el intestino y las lesiones causadas por la bacteria Helicobacter pylori.
En todos estos casos, el omeprazol actúa reduciendo la producción de ácido en el estómago, lo que disminuye la irritación y permite la cicatrización de las lesiones. Sin embargo, es importante recordar que este medicamento debe ser prescrito y supervisado por un profesional de la salud, ya que su uso indiscriminado puede tener efectos secundarios indeseados.
Condiciones para tomar el medicamento
El omeprazol de venta con receta médica, generalmente debe tomarse una vez al día antes de las comidas, pero puede tomarse dos veces al día como es el caso cuando se utiliza con otros medicamentos para eliminar la H. pylori, o hasta tres veces al día, antes de las comidas, cuando se utiliza para tratar afecciones en las que el estómago produce demasiado ácido.
Por ello, es sumamente relevante que las personas le informen al profesional de la salud que les atiende si tienen alergias al omeprazol, dexlansoprazol, esomeprazol, lansoprazol, pantoprazol o rabeprazol. De la misma manera, es importante informar si el paciente está consumiendo rilpivirina, ya que puede tener interacciones con el omeprazol.
A su vez, es fundamental notificar a su médico si tiene hipoparatiroidismo, niveles bajos de vitamina B12, osteoporosis, enfermedades del hígado o trastornos autoinmunes como el lupus eritematoso sistémico. Así mismo, se recomienda advertir si alguna vez han tenido bajos niveles de elementos como magnesio, calcio o potasio en la sangre.
Cabe resaltar que el fármaco es considerado seguro para las mujeres que se encuentran en estado de embarazo o están lactando. No obstante, antes de tomarlo, debe haber un aval de un médico, como la dosis que debe consumir la paciente.
Efectos secundarios del omeprazol
Aunque el omeprazol puede ser efectivo para aliviar las molestias gastrointestinales en muchos pacientes, es importante tener en cuenta que este medicamento también puede causar efectos secundarios que deben ser considerados antes de iniciar el tratamiento.
Entre los efectos secundarios más comunes del omeprazol se encuentran:
En algunos casos, también se ha reportado la presencia de mareos, somnolencia y cambios en los niveles de magnesio en sangre. Es importante tener en cuenta que estos efectos secundarios suelen ser leves y transitorios, ya que suelen desaparecer una vez que se suspende el tratamiento.
Efectos secundarios graves
Sin embargo, en casos más raros, el omeprazol puede tener efectos secundarios más graves, como la hipomagnesemia (niveles bajos de magnesio en sangre), la osteoporosis y la fractura ósea, especialmente en pacientes mayores que han utilizado el medicamento a largo plazo. También pueden aparecer lesiones en otras partes del cuerpo como la nariz, la boca, los labios o los genitales.
De hecho, se pueden presentar casos en los cuales los pacientes sufran de ritmo cardíaco irregular (rápido o fuerte), espasmos musculares, temblores incontrolables de una parte del cuerpo, cansancio excesivo, aturdimiento, mareos o convulsiones. Por ello, es importante que el tratamiento con omeprazol sea supervisado por un profesional de la salud, quien evaluará los riesgos y beneficios en cada caso particular.
En resumen, si bien el omeprazol puede ser un medicamento efectivo para tratar diversas molestias gastrointestinales, es fundamental conocer y tener en cuenta los posibles efectos secundarios antes de iniciar su uso, siguiendo las recomendaciones del médico tratante para minimizar los riesgos y maximizar los beneficios del tratamiento.
Es importante señalar que los riesgos de tener problemas de salud adyacentes al consumo del medicamento se incrementan cuando los pacientes toman dosis altas del fármaco o cuando se les administran durante períodos extensos, que puede ser por más de tres meses o incluso superiores a un año.
