Estudio confirma que no existe relación entre el consumo del café y problemas cardíacos

El mayor estudio poblacional realizado sobre esta posible asociación descarta que el consumo de cafeína se relacione con la probabilidad de desarrollar arritmias.

Sebastián Salguero Sebastián Salguero

    Estudio confirma que no existe relación entre el consumo del café y problemas cardíacos

    Cada taza diaria adicional de café consumida entre varios cientos de miles de individuos se asoció a un 3 por ciento menos riesgo de que se produjera cualquier arritmia, incluida la fibrilación auricular, las contracciones ventriculares prematuras u otras afecciones cardiacas comunes. El estudio, JAMA Internal Medicine.



    Este estudio, uno de los más grandes en participación, y desarrollado  por la Universidad de California San Francisco (Estados Unidos) no ha encontrado evidencia de que el consumo moderado de café pueda provocar arritmias cardiacas.



    "El café es la principal fuente de cafeína para la mayoría de la gente, y tiene reputación de causar o exacerbar las arritmias", explica el autor principal Gregory Marcus.



    "Pero no encontramos pruebas de que el consumo de cafeína conduzca a un mayor riesgo de arritmias -añade Marcus-. Nuestro estudio poblacional ofrece la seguridad de que las prohibiciones comunes contra la cafeína para reducir el riesgo de arritmia son probablemente injustificadas".



    Aunque algunas sociedades profesionales sugieren evitar los productos con cafeína para reducir el riesgo de arritmias, esta conexión no ha sido demostrada de forma consistente. De hecho, el consumo de café puede tener beneficios antiinflamatorios y está asociado a la reducción del riesgo de algunas enfermedades, incluyendo el cáncer, la diabetes y la enfermedad de Parkinson.



    En el nuevo estudio, los científicos exploraron si el consumo habitual de café se asociaba al riesgo de arritmia, y si las variantes genéticas que afectan al metabolismo de la cafeína pueden modificar esa asociación. Su investigación se llevó a cabo utilizando el Biobanco del Reino Unido.



    Se analizaron datos de 386.258 consumidores de café, con una media de edad de 56 años. Algo más de la mitad eran mujeres. Se trata de un tamaño muestral sin precedentes para este tipo de investigación.



    Además de un análisis convencional en el que se examinó el consumo de café autodeclarado como factor de predicción de futuras arritmias, los investigadores emplearon aleatorización mendeliana, que aprovecha los datos genéticos para inferir relaciones causales. 



    Dado que las personas con variantes genéticas asociadas a un metabolismo más rápido de la cafeína tomaban más café, este análisis proporcionó un método para comprobar la relación entre la cafeína y la arritmia de una forma que no dependía de las declaraciones de los propios participantes y que debería ser inmune a gran parte de los factores de confusión inherentes a la mayoría de los estudios observacionales.



    Con una media de 4 años de seguimiento, los datos se ajustaron en función de las características demográficas, la salud y los hábitos de vida. Al final, aproximadamente el 4 por ciento de la muestra desarrolló una arritmia. 



    No se observaron indicios de un mayor riesgo de arritmias entre las personas genéticamente predispuestas a metabolizar la cafeína de forma diferente. Los investigadores señalan que una mayor cantidad de café se asocia en realidad a un riesgo 3 por ciento menor de desarrollar una arritmia.



    No obstante, los autores citan como limitaciones de su estudio naturaleza de autodeclaración de los participantes y que no se disponía de información detallada sobre el tipo de café consumido.



    "Solo un ensayo clínico aleatorizado puede demostrar definitivamente los efectos claros del consumo de café o cafeína -concluye Marcus-. Pero nuestro estudio no encontró evidencia de que el consumo de bebidas con cafeína aumente el riesgo de arritmia. Las propiedades antioxidantes y antiinflamatorias del café pueden desempeñar un papel, y algunas propiedades de la cafeína podrían ser protectoras contra algunas arritmias".



    Fuente: Jama

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