Recientemente, la gobernadora Wanda Vázquez informó que algunos sectores económicos en Puerto Rico se irían restableciendo gradualmente para no afectar las finanzas de la isla.
César Fuquen Leal
Agencia Latina de Noticias de Medicina y Salud Pública
Recientemente, la gobernadora Wanda Vázquez informó que algunos sectores económicos en Puerto Rico se irían restableciendo gradualmente para no afectar las finanzas de la isla. Esto quiere decir que cientos de boricuas saldrán nuevamente a las calles a trabajar, lo que supondría un serio problema de salud pública.
Para conocer algunas reacciones desde el ámbito salubrista, la Revista Medicina y Salud Pública (MSP) entrevistó a la Dra. Ángeles Rodríguez, infectóloga y ex epidemióloga del Estado, quien cuenta con amplia experiencia en temas de salud pública. Frente a la reapertura económica de la isla, la galena afirmó que:
“Yo entiendo que la decisión de abrir es una decisión política y económica. No está basada en ningún dato, ni en ningún razonamiento que tenga que ver con la salud pública. La gobernadora entiende que puede sacrificar alguna gente porque va haber gente que va a morir. Pero entiende que hay que hacer un balance entre la economía y la vida y la economía ganó esta vez”, alertó la Dra. Rodríguez.
Según la Dra. Ángeles, uno de los retos de salubridad más difíciles que enfrenta la isla actualmente es la falta de un perfil epidemiológico del nuevo coronavirus que determine las edades, zonas geográficas y sintomatología del COVID-19 en la isla.
“Nosotros ni siquiera tenemos un perfil de cómo se comporta la pandemia en Puerto Rico. Nosotros no sabemos cuál es la población que tiene más anticuerpos en este momento. (...) Yo no sé si el Gobierno lo sabe, pero ellos tienen los datos y nadie los ha mirado y los datos que se recogen son para tomar acción, para mirarlos y evaluarlos, y a base de ello, empezar a diseñar una estrategia informada basada en el comportamiento de la enfermedad aquí, no en China, no en Estados Unidos, aquí en Puerto Rico”, alertó la ex epidemióloga.
Conocer la verdadera incidencia del virus es uno de los métodos más efectivos para controlarlo. Sin embargo, la doctora Rodríguez considera que el Gobierno, de la mano del Departamento de Salud no han expuesto las cifras reales del COVID-19 en la isla.
“Esos números no han sido analizados. El perfil del enfermo en Puerto Rico no se ha hecho público. No se sabe si son de tal a tal edad, si tienen estas características, los síntomas más frecuentes son X, Y, Z. Los niños se comportan de esta forma, las áreas donde más incidencia de casos ha sido en estas áreas”.
Ninguno de los aspectos antes mencionados, según la galena, han sido expuestos, lo que dificulta un verdadero manejo del virus. Igualmente, la especialista se hace el siguiente interrogante: ¿Con base en qué información el Gobierno de Puerto Rico toma las decisiones a nivel de salud pública?
“Hay otras áreas que son de menor riesgo y la gente que vive en esas áreas sepa que entonces sí puede salir a caminar por las tardes donde hay seguridad, mientras otros pueden decir: ‘yo me quedo en casa hasta que todo pase en esta área’. Esa es la razón por la cual se deben recoger los datos, para poder darle mayor personificación al comportamiento de la pandemia para que la gente sepa cómo se va a proteger. Antes me tenía que quedar en casa: ¿por qué? Ahora puedo salir: ¿por qué? O sea, darnos la explicación basada en qué están tomando decisiones que afectan la vida de la población”, cuestionó.
La infectóloga considera que el impacto de la reapertura solo se podrá determinar una vez se ejecute dicha estrategia. Igualmente, elevó las alertas frente a los pacientes que podrían tener un desenlace fatal en caso de ser contagiados del COVID-19.
“Yo pertenezco a un grupo de riesgo y entiendo que a los que se están poniendo en riesgo mortal es a las personas que levantaron este país, que somos los que estamos ahora por encima de los 60 años. Nos toca a nosotros cuidarnos y protegernos porque evidentemente la decisión no va dirigida a proteger a los que son más vulnerables. Va dirigida a los más saludables pues van a poder sobrevivir a la infección con poco o ninguna consecuencia”, determinó la infectóloga.
Pese a que el sistema de salud de la isla está tomando las medidas de contingencia para frenar el virus, la infectóloga Ángeles considera categóricamente que Puerto Rico no tiene oportunidad en caso de enfrentarse a una epidemia como la que vivió la gran manzana estadounidense.
“Espero que el Departamento de Salud se fortalezca progresivamente. Pero realmente ¿si yo creo que la parte privada y los hospitales están preparados para aceptar un flujo de pacientes mayor del que tenían masivo? ¡NO! Puerto Rico no está preparado para que le pase lo que le pasó a Nueva York. Esperemos que no lleguemos a eso. Esperemos que sí pasa algo, sea algo que pueda ser resuelto con los recursos que tenemos”, concluyó la ex epidemióloga en diálogo con MSP.