El médico dijo que en el 2019 antes de la pandemia las llamadas llegaron a unas 170 mil, mientras que después de la pandemia rondaron la cifra récord de 900 mil llamadas.
Los casos de depresión han aumentado significativamente en la Isla, tras las crisis sufridas por los puertorriqueños en los últimos dos años, reconoció hoy la Administración de Servicios contra la Adicción y Salud Mental, (AMSCA).
El secretario de la agencia, Dr. Carlos Rodríguez Mateo, dijo a la Revista de Medicina y Salud Pública que el número de llamadas a la línea de emergencia PAZ se han multiplicado dramáticamente y en la mayoría de los casos los pacientes exhiben síntomas de depresión y ansiedad.
El médico dijo que en el 2019 antes de la pandemia las llamadas llegaron a unas 170 mil, mientras que después de la pandemia rondaron la cifra récord de 900 mil llamadas.
"Este año tenemos unas 270 mil llamadas, lo que revela que la situación sigue siendo difícil", dijo Rodríguez Mateo al admitir que la crisis política provocada por la salida forzada del exgobernador Ricardo Rosselló, la pandemia, los terremotos, y los daños ocasionados por el huracán María han afectado significativamente la salud mental de los puertorriqueños.
El galeno anunció que esta temporada navideña su agencia dará particular atención a la incidencia de depresiones en la población. "Mucha gente ha perdido a sus seres queridos porque murieron de COVID-19 y otros ya no los tienen físicamente aquí porque se han ido de la Isla", dijo el Doctor Rodríguez un ex senador y exalcalde.
Recordó que el Sistema de Vigilancia de Factores de Riesgo de Comportamiento, un instrumento del CDC ha venido registrado aumento de este padecimiento en Puerto Rico para el 2011 registraba un 16% de prevalencia por depresión, y que, para el 2014 aumentó a un 18%.
“Esta es una cifra altísima comparada con la incidencia de esta enfermedad mental en adultos de Estados Unidos, que es de un 13%, o con respecto a las Américas que es del 5% de la población de todo el continente,” aseveró el psicólogo José Pons Madera, presidente de la Universidad Carlos Albizu, durante entrevista con la Revista Medicina y Salud Pública (MSP).
Con lo anterior, el galeno indica que esta alta prevalencia de trastornos afectivos en los puertorriqueños es preocupante, pues aproximadamente la mitad son pronosticados como depresión mayor.
¿Cómo diagnosticar la depresión?
Pons indica que existen dos formas de detectar la depresión: una es a través de la recopilación de los síntomas que manifiesta la persona; y otro modo, es la observación, utilizado frecuentemente con niños y adolescente que no pueden verbalizar sus sentimientos.
Entre otras cosas, el especialista en psicología comenta que normalmente, las personas comienzan a presentar cuadros denominados síntomas neurovegetativos que, en palabras de Pons, refiere a la alteración de las funciones básicas y biológicas, reflejadas en el cansancio, la anhedonia (falta de motivación), el insomnio, problemas de concentración y pérdida del apetito.
El segundo grupo de síntomas afectantes son los afectivos, que es por lo que los profesionales de la salud mental tienden a detectar la depresión, debido a la tristeza “la persona depresiva casi siempre tiene una presencia triste y sufren mucho de angustia o ansiedad”, manifiesta.
Por otra parte, el especialista aduce que existe otro grupo de síntomas cognitivos, donde se encuentra un grupo de pacientes con ideas suicidas, pesimistas y sentimientos asociados con culpabilidad, además, problemas severos de autoestima.
Ante esto, el presidente de la Universidad Carlos Albizu advierte que, para dar un diagnostico de depresión la persona debe presentar estos síntomas durante aproximadamente dos semanas.