La alegría de ver a los niños después de haber sido intervenidos por él, hace que no se arrepienta de haber escogido su profesión.
Los pediatras cumplen una función importante en la medicina, pues son aquellos filtros de detección y tratamiento para todas las anomalías que se presentan en los niños. Así lo manifestó el doctor Jorge Zequeira, cirujano pediátrico de la Escuela de Medicina de la Universidad de Puerto Rico (UPR), en exclusiva para la revista de Medicina y Salud Pública.
“Escogí cirugía porque me gusta resolver problemas de inmediato, y dentro de la mayor parte de las disciplinas médicas, esta es una donde yo, con mis manos, puedo intentar resolver un problema y tener la gratificación instantánea; el inconveniente lo vimos, y lo resolvimos”, explicó.
El especialista realizó su residencia de cirugía general en la misma facultad, donde además participó durante un año en investigación clínica con la División de Trauma en la UPR. Finalmente, viajó a Canadá, donde se entrenó formalmente en cirugía pediátrica en un hospital de la ciudad de Hamilton, en Ontario.
“He gozado de la oportunidad de llevarme bien con los niños, de comunicarme con los padres sin ningún tipo de contratiempos, ni obstáculo. Me siento bien cómodo estando alrededor de niños, jugando con ellos. Es muy gratificante ver que a los niños les va bien, después de haberlos atendido”, enfatizó el experto. 'En adición a eso, alegrar la cara de estos padres: No hay nada más satisfactorio que ver a un papá contento', aseguró el especialista.
Cuenta con entrenamiento Post-Doctorado de investigación clínica en Cirugía de Trauma y Cuidado Critico en la Escuela de Medicina de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Ciencias Médicas.
Al iniciarse como cirujano pediátrico, el Dr. Zequeira estuvo en un centro académico de tiempo completo, donde atendía exclusivamente a pacientes en el Hospital Pediátrico. “Para ese momento, éramos menos cirujanos pediátricos para tantos pacientes. Y me encantaba que, a medida que pasa la carrera, tenemos que atender a otros niños y darnos a conocer en otras partes de la isla, no solo en la parte académica. Y es ahí cuando comienzo a hacer un poco más en la práctica privada”, indicó.
El experto resaltó que, a diferencia de la población pediátrica, la población adulta cuenta con numerosos especialistas para cada tipo de condición. Mientras que en los niños, es más común que sea un solo experto quien atienda las diferentes especialidades.
“Nosotros como pediatras atendemos cáncer pediátrico, tumores de riñón, glándulas adrenales, lesiones quísticas en los pulmones de los bebés recién nacidos, entre otros casos más comunes que se presentan en estos chicos”, explicó.
El doctor es especialista en: Cirugía Pediátrica General, Laparoscopía, Toracoscopía y Oncología Quirúrgica.
Además, los pediatras buscan establecer la anatomía de los niños para que puedan ser personas saludables y tengan un futuro sin complicaciones médicas. Además, no debemos olvidar que actualmente la pediatría en la isla se encuentra a la vanguardia, pues los procedimientos que se están realizando a los niños son mínimamente invasivos y los instrumentos son finos y delicados. Esto favorece que los niños puedan tener una recuperación más rápida, tengan menos dolores, se sientan más cómodos y puedan regresar a casa lo más pronto posible.
Al igual que todos los procesos médicos, la cirugía pediátrica cuenta con diagnósticos e intervenciones complejas que se tornan retantes para los expertos.
“Aparte de los problemas de nuestros pacientes, tenemos que atender las necesidades emocionales de los papás de los niños, como parte de nuestra profesión. Adicional a esto, una complicación nunca es fácil de asimilar, y uno se preocupa mucho también, uno sufre estas cosas como si le ocurrieran a uno también”, dijo.
El vínculo de profesional y paciente es importante, y no podemos dejar de lado la conexión entre los doctores y los padres de los pacientes: “La alegría que uno siente de ver a una madre o un padre contento y alegre porque realizamos una intervención a su hijo, que fue exitosa, y aún cuando las cosas no necesariamente salen bien, el poder estar ahí con ellos, ayudarlos a pasar por ese obstáculo y fortalecer ese vínculo que existe es algo bien especial”, concluyó el doctor Jorge Zequeira.