Mantener los dientes blancos se ha convertido en un tema de gran interés para las personas, ya que está relacionado tanto con la salud como con la estética. Existen diversos factores externos que pueden ocasionar que los dientes adquieran un tono amarillento.
El esmalte dental es una capa externa dura que protege los dientes, mientras que la dentina, ubicada debajo del esmalte, también puede verse afectada por los hábitos diarios de cada persona. Además, con el paso del tiempo, el esmalte puede desgastarse debido al consumo de ciertos alimentos y bebidas ácidas, como el café, el vino y los refrescos, entre otros.
En una entrevista con el medio ´Europa Press´, el dentista Óscar Castro Reino, presidente del Consejo General de Dentistas, comentó lo siguiente: "Esto permite que se vea más la dentina, que es de un color más amarillento. Además, la dentina también puede oscurecerse debido a la acumulación de bacterias".
El experto también destacó que el cambio de color de los dientes suele ser causado principalmente por la acumulación de pigmentos en el esmalte y la dentina. Sin embargo, el envejecimiento y ciertos hábitos como fumar o consumir determinados alimentos también contribuyen a este fenómeno.
Además, el tabaquismo o el consumo de tabaco puede dejar manchas amarillas o marrones, y estos hábitos, además de dañar los dientes, pueden ser perjudiciales para la salud en general, ya que provocan diversas enfermedades.
"El paso de los años hace que el esmalte pierda vigor, y la dentina amarillenta debajo se vuelva más visible. Por último, algunos antibióticos, como las tetraciclinas, si se toman durante el desarrollo de los dientes, especialmente en la niñez, pueden mancharlos de forma permanente", afirmó Castro.
El dentista Óscar Castro Reino también recordó que la acidez de la saliva influye en la aparición de manchas, ya que un pH ácido debilita el esmalte dental y facilita la adhesión de los pigmentos. "Mantener una dieta equilibrada y evitar alimentos muy ácidos puede ayudar a mantener un pH adecuado", añadió el especialista.
Desde la clínica Dental de Albero Romero, señalaron que el tono amarillento de los dientes también puede estar vinculado con la genética, lo que hace que la pigmentación sea menos controlable, ya que depende del ADN de cada paciente.
"El esmalte dental se ve afectado por el desgaste y la desmineralización que sufren a diario los dientes. Por ello, las personas mayores tienden a tener una dentadura amarillenta, oscura y poco estética", explicaron desde la clínica.
Para el doctor Castro, es esencial el cepillado adecuado de los dientes, ya que una buena higiene oral previene la acumulación de placa, que también es un factor que contribuye al cambio de color.
"Como sabemos, la placa dental es una capa de bacterias que se forma en los dientes cuando no se realiza una adecuada higiene bucal. Si no se elimina, se convierte en sarro, que tiene un color amarillo o marrón y es más resistente, afectando seriamente la salud de las encías y provocando enfermedades periodontales", explicó Castro.
Cuando las personas no mantienen una higiene adecuada o realizan un cepillado incorrecto, favorecen la acumulación de placa, lo que provoca que los dientes adquieran un color amarillento o marrón.
Para evitar este problema, es necesario seguir medidas preventivas, como cepillarse los dientes al menos dos veces al día, durante dos minutos, utilizando una pasta que contenga flúor. Además, es fundamental acudir regularmente al dentista para que realice las limpiezas correspondientes.
"Siempre insistimos en dejar atrás hábitos perjudiciales como el tabaco y el alcohol y, en la medida de lo posible, reducir el consumo de alimentos y bebidas que manchan, como el café o el té", concluyó Castro Reino.
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