El PAP consiste en tomar una pequeña muestra de células del cérvix para realizar un estudio de éstas y detectar cualquier posible anomalía o padecimiento, entre los que destacan el virus del papiloma humano.
Someterse a la prueba del Papanicolau es una de las preocupaciones constantes en la actualidad para todas o, por lo menos, la mayoría de las mujeres, pues como es bien sabido se trata de una prueba también conocida como citología cervical que consiste en tomar una pequeña muestra de células del cérvix para realizar un estudio de estas y detectar cualquier posible anomalía o padecimiento, entre los que destacan el virus del papiloma humano.
Por supuesto, dada la importancia que tiene esta prueba para el estado de salud de muchas mujeres, la preocupación por conocer más al respecto es cada vez mayor y en consecuencia ha surgido una gran cantidad de dudas al respecto sobre su forma de aplicación, el especialista que debe llevar a cabo este tipo de exámenes, tiempo de duración y los requisitos o consideraciones previas a someterse a la prueba.
En primer lugar, es necesario estar completamente consciente que la citología cervical es una prueba de tamizaje, es decir, se trata de un examen en el que se realiza una evaluación o medición para verificar el nivel o porcentaje de probabilidad de que la persona padezca alguna enfermedad o condición, sin embargo, esta prueba no puede determinar con precisión un resultado y muchos menos es infalible.
A pesar de esto, la prueba del Papanicolau es sumamente recomendada y promovida por médicos y especialistas de la salud, y la razón de esto es que se trata de un método de análisis no invasivo que requiere un procedimiento rápido y sencillo que resulta muy efectivo para determinar si existe la probabilidad de que la mujer sea propensa o no a desarrollar un padecimiento grave, sobre todo un proceso canceroso incluso cuando no se presentan síntomas de ello.
Como se sabe, la prueba consiste en la obtención de una pequeña muestra de células del cérvix, para lo cual se realiza un suave raspado de la pared del cuello del útero por medio de un hisopo. Pero para que este procedimiento sea exitoso y los resultados del estudio de las células obtenidas sean lo más preciso posible, es necesario que la paciente cumpla con algunos requisitos muy puntuales, los cuales se indican a continuación.
Por supuesto, esta recomendación únicamente es aplicable para mujeres cuyo ciclo es regular. En el caso de mujeres con ciclo menstrual irregular, únicamente se requiere que la prueba se realice cuando no se está menstruando.
Como se puede notar, básicamente son cinco los requisitos o consideraciones fundamentales que se deben cumplir antes de someterse a una citología cervical, requisitos para garantizar que el proceso sea más rápido y sencillo y que los resultados sean mucho más confiables. Mientras tanto, los últimos tres puntos mencionados en esta lista son aspectos importantes a considerar, pero que no necesariamente son obligatorios para someterse a la prueba o que esta sea efectiva.
Como consideraciones finales, se pueden agregar un par de recomendaciones, que son acudir a la clínica o con el médico con actitud positiva, relajada y sabiendo que se trata de una prueba que no provoca dolor, no es invasiva, no tiene secuelas y es realizada por profesionales, por lo que no hay motivo para sentir ansiedad, miedo o vergüenza.
De igual forma, se recomienda realizar esta prueba una vez al año y después prolongar el periodo a tres años, siempre y cuando en las primeras tres o cuatro ocasiones no se detecte problema alguno y se tenga una vida sexual monógama.
Finalmente, la última recomendación para que la prueba del papanicolau sea rápida, sencilla, adecuada y ofrezca resultados confiables, se recomienda acudir a la mejor clínica especializada en el tratamiento de la mujer, en el cuidado de su salud y en su atención y bienestar generales: Reina Madre.
Fuente: Clínica de la mujer Reina Madre