Un olvido constante en la hora de la toma, los efectos secundarios o el precio de los medicamentos, son las razones más comunes por las que las personas dejan de tomar los medicamentos recetados para tratar la hipertensión poniendo en riesgo su vida.
Lo complejo de esto es que es una condición altamente peligrosa. En muchos casos sus síntomas no son perceptibles por lo que se conoce como 'asesina silenciosa'.
Los medicamentos son necesarios para tratar un derrame cerebral o un ataque cardíaco. Sin embargo, sus componentes pueden hacer que las personas se sientan con demasiado malestar.
Pero es importante resaltar que así no se quieran tomar, son necesarios para mejorar la salud, por lo que lo mejor es acostumbrarse a ellos.
Efectos negativos
Muchos de los pacientes dicen sentirse nerviosos y mareados. En la mayoría de los casos los efectos secundarios más comunes son mareos o náuseas y para el caso puntual de los hombres, se registran problemas de erección.
Por la incomodidad y el malestar generado a causa de la medicación, estudios demuestran que casi la mitad de los pacientes no toman sus medicamentos a la hora recomendada.
Esto, pese a conocer las altas cifras de mortalidad como deberían, a pesar que las altas cifras de mortalidad que se presentan por enfermedades del corazón.
Pero para muchas personas, tener la presión alta es un evento cardíaco catastrófico y por ello, es conocida medicamente la hipertensión como un 'asesino silencioso'.
Diagnóstico
La buena noticia, es que ahora los especialistas podrán saber si los pacientes toman o no sus medicamentos en los horarios establecidos a través de una simple muestra de orina. Esto, le permitirá a los médicos reaccionar a tiempo, ya que muchas veces esta información no es completamente sincera por parte de los pacientes.
La nueva prueba llamada KardiAssure, que tarda tan solo tres minutos analiza la orina en busca de 80 tipos de medicamentos para la presión arterial y el colesterol. Así, es más fácil determinar si un paciente ha tomado sus pastillas rigurosamente.