Cada año en Estados Unidos, menos de uno en un millón de receptores de otras vacunas tiene una reacción anafiláctica, dijo Offit. Esas reacciones son tratables y mucho más fáciles de controlar que un caso grave de COVID-19.
La semana pasada con la aprobación de la vacuna de Pfizer y bioNTech en dos salubristas se presentó una reacción alérgica hacia la vacuna, donde pudieron comprobar que estas personas tenían un historial clínico de varias alergias, aunque ambos salubristas fueron tratados y se recuperaron con éxito los reguladores británicos recomendaron que las personas que han sufrido graves reacciones alérgicas no se vacunen. Incluso entre quienes tienen alergias alimentarias o las picaduras de abeja, la anafilaxia es poco frecuente.
La anafilaxia puede poner en peligro la vida ya que puede tener problemas respiratorios, caídas fuerte de presión arterial que se puede presentar en cuestión de minutos o segundos luego de la exposición a un alimento o medicamento o incluso al látex a la que la persona es alérgica.
Desde ese momento las autoridades británicas han aclarado sus preocupaciones, al cambiar la redacción de reacciones alérgicas graves para de esta manera especificar que la vacuna no debe administrarse a nadie que haya tenido alguna vez una reacción anafiláctica a un alimento, medicamento o vacuna. Ese tipo de reacción a una vacuna es rara afirmaron.
Funcionarios de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) comunicaron que tras lo ocurrido con los casos británicos, indican que Pfizer requiera hacer monitoreos de la anafilaxia y presente datos al respecto una vez que la vacuna entre en uso.
El panel de científicos expertos de la FDA votó el jueves para recomendar la autorización de la vacuna para su uso en casos de emergencia, pero también expresó la preocupación por la necesidad de hacer seguimiento de la anafilaxia. La agencia suele aceptar las recomendaciones de los expertos y se espera que la autorización se de en poco días. La vacunación podría comenzar la próxima semana en Estados Unidos.
De acuerdo con el informe inicial donde prendió alarmas ya que se aconsejo que personas con alergias graves no se vacunan y esto uso que las personas se sintieran confundidos y vulnerables ante la decisión ya que esperan que sea igual de seguras para ellos.
Pero la posterior aclaración de los reguladores especificó que su consejo se aplicaba a las personas que habían sufrido alguna vez anafilaxia. Insistió que a las personas con “ antecedentes de alergias graves” a que lo discutiera con sus médicos “antes de recibir la dosis”.
Las autoridades también dijeron que las inyecciones deben administrarse sólo en entornos equipados por si llega a pasar alguna situación mediante la aplicación de la inyección de epinefrina, también conocida como adrenalina.
Los dos trabajadores de la salud en Gran Bretaña habían experimentado anafilaxis en el pasado debido a alergias a los alimentos, dijo el funcionario de Pfizer durante la reunión de la FDA. Ambos llevan dispositivos tipo EpiPen para inyectar epinefrina en caso de tal reacción. Estas dos personas requirieron epinefrina para tratar sus reacciones a la vacuna y ambos se recuperaron satisfactoriamente.
Las autoridades sanitarias británicas dijeron que seguirán investigando aunque aún no se sabe si fue algún ingrediente de la vacuna lo que causó las reacciones de los trabajadores. Las personas con un historial de reacción anafiláctica a cualquier vacuna fueron excluidas de los estudios de Pfizer, agregaron los funcionarios de la compañía en la reunión.
En un documento publicado por la FDA el martes explicó que entre los que participaron en los ensayos un número pequeño de personas tuvo reacciones alérgicas y aseguró que el 0,63% de los participantes que recibieron la vacuna informaron sobre posibles reacciones alérgicas, en comparación con el 0,51% de las personas que recibieron un placebo.
En el ensayo clínico de última etapa de Pfizer, uno de los 18.801 participantes que recibieron la vacuna tuvo una reacción anafiláctica, según los datos de seguridad publicados por la FDA el martes. Eso no ocurrió en ninguno en el grupo de placebo.
El experto Anthony Fauci, experto del país en enfermedades infecciosas, aseguró el miércoles que las reacciones alérgicas eran preocupante pero muy probablemente raras, el tipo de efecto que aparecen cuando una vacuna pasa de las pruebas a una distribución más amplia.
“Si yo fuera una persona con una tendencia alérgica subyacente, querría estar preparado ante la posibilidad de tener una reacción y por lo tanto, estar listo para tratarla” aseguró Anthony en el programa en internet moderado por Sanjay Gupta de CNN que fue patrocinado por Harvard y The New England Journal of Medicine.
“Esa es una de las razones por las que es importante cubrir el frente con diferentes plataformas de vacunas” agregó “Si de hecho descubrimos que hay un problema constante en cierto subconjunto de personas, como las que tienen reacciones alérgicas, siempre habrá otras plataformas de vacunas que se puedan utilizar y es de esperar que no se vea con esas otras plataformas”.
El experto Paul Offit, médico experto en vacunas del Hospital Infantil de Filadelfia aseguro que las recomendación inicial y generalizada en Gran Bretaña de mencionar las reacciones alérgicas graves parecía ser una reacción exagerada que podría asustar innecesariamente a muchas personas que se alejaran de una vacuna que se necesita desesperadamente en medio de la pandemia.
Millones de personas en Estados Unidos tienen alergias, pero eso no significa necesariamente que la vacuna sea un riesgo para ellos, afirmó.
Cada año en Estados Unidos, menos de uno en un millón de receptores de otras vacunas tiene una reacción anafiláctica, dijo Offit. Esas reacciones son tratables y mucho más fáciles de controlar que un caso grave de COVID-19, aseguró el experto.
Muchas personas con alergias a alimentos, picaduras de abejas o medicamentos han recibido múltiples vacunas sin problemas. Como miembro del panel asesor de la FDA que se reunió el jueves, Offit votó a favor de autorizar la vacuna Pfizer. Pero durante la discusión del panel sobre las reacciones alérgicas, dijo, “este tema no va a acabar hasta que tengamos mejores datos”.