Hoy día existen tratamientos con mínimos efectos secundarios e inclusive terapias de prevención del VIH.
En diálogo con la Revista Medicina y Salud Pública, la Dra. Lizette Santiago Colón, medicina de familia / AAHIVS y Medical Director HOPE Clinical Research destacó la evolución del diagnóstico y tratamientos del VIH en Puerto Rico, logrando que en la actualidad, existan múltiples medicamentos para tratarlo, que les han permitido a los pacientes tener una mejor calidad de vida y no verse impedidos por la enfermedad.
“Inicialmente, el AZT fue el primer medicamento para el VIH en 1987, era muy tóxico y se usaba muchas veces al día, por lo que muy pocos pacientes podían tolerarlo, sobre todo porque en ese momento la mayor parte de las personas eran diagnosticadas cuando tenían sida, es decir, la condición inmunológica muy avanzada”.
Posteriormente, con el transcurrir de los años, se empezaron a añadir otros medicamentos para el tratamiento de los pacientes, era lo que se conocía como el ‘cóctel del VIH’, que “incluía una combinación de tratamientos que abarcaban entre 14 y 24 tabletas, hasta cinco veces al día” añadió Colón. Además, los pacientes se veían afectados no solamente por la frecuencia sino por la toxicidad que provocaban, limitándolos en su vida cotidiana.
Al respecto, la especialista destaca que “hoy la mayor parte de nuestros pacientes toman solo 1 tableta al día que combina muchos de esos medicamentos, incluso ahorita podemos ahondar más en terapias que se están haciendo, como inyecciones cada dos veces, sin medicamentos”.
Por su parte, el Dr. Roberto Calderón, especialista en Medicina Interna y en VIH, reconoció que el poder disminuir la cantidad de medicamentos que los pacientes necesitaban, les ayudó a mantener el virus no detectable, además del gran avance médico liderado por especialistas puertorriqueños, el VIH en el embarazo: “hoy en día podemos ofrecer la seguridad de que una mujer puede embarazarse viviendo con VIH y teniendo la seguridad de que ese bebe va a nacer sin VIH”.
“Nuestra recompensa es cuando vemos en los laboratorios, muestras de sangre de como se está comportando el virus y vemos que está indetectable, expresó la Dra. Colón, “la recompensa grande saber es que si yo como paciente estoy indetectable no transmito mi virus a otra persona, es decir que es intransmisible y eso le permite al paciente disfrutar de su vida sexual y por ende mejora su calidad de vida” agregó.
Los especialistas señalan que la expectativa de vida de una persona con VIH es igual a la de una persona que no tiene la condición, por lo que los avances científicos y tratamientos son de la más alta calidad. Sin embargo, los métodos de exposición siguen siendo los mismos desde la detección del primer caso de VIH, por lo que enfatizan en la importancia de hacerse la prueba, ya que todas las personas tienen riesgo de contagiarse.
Al respecto, la Dra. Colón reconoce que “en la época de los 80 y 90 la incidencia mayor en Puerto Rico era la población que utilizaba sustancias inyectables, ese era el método principal de trasmisión, pero, hoy en día, la población mayor que tenemos nosotros son hombres de la comunidad LGBTQI, ya que al tener actividad sexual los expone mayor al riesgo”.
Por otro lado, indica que las mujeres siempre han estado en un segundo nivel con relación a las estadísticas, puesto que a las mujeres en etapas de embarazo se les hacen esas pruebas de rutina, entonces se puede detectar, pero, en los hombres depende que lo identifiquen y acudan a hacerse la prueba.
El VIH y su evolución frente a otros virus
Para el Dr. Calderón, si se compara en términos de años lo que se sabe del COVID, podría decir que es una enfermedad viral prácticamente nueva, sin embargo, ha tenido un avance en poco tiempo. “Si revisamos la historia desde que comenzó el VIH en los 80 y todo lo que tenemos en el 2022, podemos decir que estudiar, comprender, conocer y controlar el virus no ha sido tarea fácil, pero tenemos que tener en consideración que no se poseía la tecnología que tenemos hoy en día que permite estudiar el comportamiento de estos virus de una manera rápida”.
Otro virus sobre el cual hizo referencia es el del VPH, que es muy común en los pacientes. “No existe un tratamiento para el VPH hasta esta fecha y conocemos el virus desde hace años, además de los problemas de salud que genera, pero no existe un tratamiento en la actualidad.
También destacó que el VIH, al ser una enfermedad infamatoria, también provoca en los pacientes el surgimiento de complicaciones de forma más temprana, como es el cáncer, y el desarrollo de enfermedades metabólicas como diabetes, alta presión, problemas del sistema renal y cardiovascular y eso impacta de manera directa la salud pública.
En este sentido, los especialistas señalan que uno de los retos más grandes cuando reciben un diagnóstico de un paciente con VIH no es el tratamiento porque afirman que existen buenos medicamentos con pocos efectos secundarios, si no es el hecho de empoderar al paciente que viene lleno de temor, con miedos y crisis sobre su situación de haberse contagio.
Para la Dra. Colón, el impacto de la evolución del VIH se hubiera podido mitigar desde décadas atrás, ya que considera que se desaprovechó el tiempo cuando comenzó la propagación, debido a que el VIH afectó a la población LGBTQI, que para el contexto de los años 80, eran una comunidad marginada y el enfoque médico científico no estaba orientado a las necesidades de esa población.
También, afirmó que el comportamiento del virus es complejo, lo ideal sería contar con una vacuna, sin embargo, no se ha podido realizar debido a que el virus muta.
Prevención del VIH
“Recuerdo la primera vez que hable de prevención para VIH y los médicos me miraron raro, ya que no se explicaban cómo le vamos a dar medicamentos a pacientes que están bien” expresó la Dra. Colón, quien a su vez afirma que hoy en día la prevención del VIH es una iniciativa que se está adelantando en Puerto Rico. “Inclusive tenemos en el Centro Ararat una clínica de salud sexual donde se ofrecen los tratamientos de prevención y la idea es que si yo tengo una exposición de riesgo, se identifique en entrevistas y pruebas para comenzar con un tratamiento” añadió.
Asimismo, la especialista destaca que han ayudado a muchos pacientes, ya que no todo el mundo va a estar en prevención eternamente, pero el hecho de que el paciente tome un medicamento le ayuda a modificar el comportamiento del virus para no correr riesgos.
VIH en adultos mayores
Con relación a la infección en personas adultas, el Dr. Calderón, afirma que estadísticamente los pacientes con VIH en Puerto Rico y EE.UU, se encuentran en edades de 24 a 50 años, en la edad productiva, sin embargo, existe una población adulta mayor que se está infectando y son más vulnerables, por lo que su expectativa de vida disminuye.”Lo que tenemos que tener en consideración es orientar a esta población y ordenarles todos los estudios para poder saber si están desarrollando o no algún tipo de complicaciones graves”.
El futuro del VIH y sus tratamientos
Para los especialistas, en los próximos 5 a 10 años, la evolución de los tratamientos para el VIH será positivamente, ya que se están desarrollando medicamentos por medio subcutáneo o implantes por debajo de la piel, con una duración de 6 meses a un año, en las que los pacientes podrán controlar la enfermedad y tener una mejor calidad de vida.
En cuanto a los síntomas del VIH, es importante conocer que cuando empiezan a manifestarse, es cuando el sistema inmunológico del paciente se encuentra bajo y muchos de los síntomas vienen asociados a una enfermedad oportunista, por lo que reafirman la importancia de las pruebas, porque la sintomatología llega muy tarde.
Vea el programa completo aquí.