Las glándulas de Skene están localizadas a los lados de la uretra de la mujer, próximas a la entrada de la vagina; estas son responsables por liberar un líquido blanquecino o transparente que representa la eyaculación femenina durante el coito.
Las glándulas de Skene están localizadas a los lados de la uretra de la mujer, próximas a la entrada de la vagina; estas son responsables por liberar un líquido blanquecino o transparente que representa la eyaculación femenina durante el coito. El desarrollo de las glándulas de Skene puede variar entre las mujeres, de modo que en algunas puede ser más difícil estimular estas glándulas.
En ciertos casos, cuando las glándulas de Skene se obstruyen, puede surgir la acumulación de líquido en su interior, causando inflamación y provocando el surgimiento de un quiste que puede ser tratado con medicamentos antiinflamatorios o cirugía.
Para qué sirven las glándulas
Las glándulas de Skene son responsables por producir y liberar un líquido incoloro o blanquecino y viscoso por la uretra durante el contacto íntimo cuando estas son estimuladas, dando como resultado la eyaculación femenina.
El líquido eyaculado no tiene relación con la lubricación vaginal, pues esta ocurre antes del orgasmo y es producida por las glándulas de Bartolino, mientras que la eyaculación ocurre en el clímax del contacto íntimo y el líquido es liberado a través del canal de la uretra.
Principales síntomas de inflamación
La inflamación de las glándulas de Skene puede ocurrir debido a una obstrucción en los canales de las mismas, la cual hace que el líquido, en vez de ser liberado, se acumule en la glándula, produciendo síntomas como:
En la mayoría de los casos el quiste de la glándula de Skene presenta un tamaño menor de 1 cm, poro lo que produce pocos síntomas. Sin embargo, cuando crece mucho puede causar los síntomas mencionados e incluso obstruir la uretra, dificultando la salida de la orina.
Los síntomas de este tipo de quiste también pueden confundirse con los de una infección urinaria. De esta forma, siempre que haya algún tipo de dolor o malestar persistente en la zona íntima es importante consultar a un ginecólogo para que evalúe e identifique la causa e inicie el tratamiento más adecuado.
Además de la inflamación, el quiste puede infectarse y dar origen a un absceso, que se caracteriza por la presencia de pus. Normalmente, esta infección está relacionada con la presencia del parásito Trichomonas vaginalis, responsable por la tricomoniasis. En este caso y cuando el quiste es grande, la mujer puede tener fiebre, dolor durante el coito, al sentarse, al caminar y orinar, sensación de un bulto en la vagina y secreción purulenta, pudiendo desarrollar también retención urinaria o una infección urinaria.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento para el quiste en las glándulas de Skene debe ser indicado por un ginecólogo, este generalmente es iniciado mediante medicamentos analgésicos y antiinflamatorios, como Ibuprofeno o Paracetamol, para aliviar el dolor y reducir la hinchazón. En el caso de haber signos y síntomas de infección, el médico también puede recomendar el uso de antibióticos, como Amoxicilina, por ejemplo; además de ser necesaria la remoción del pus presente en el quiste, siendo esto realizado por medio de una pequeña incisión quirúrgica.
En los casos más graves, donde no es posible aliviar los síntomas del quiste sólo con medicamentos, el ginecólogo puede indicar la cirugía para retirar las glándulas de Skene.
Fuente: Tua Saúde