Exhortan a la comunidad médica a tomar conciencia sobre la necesidad de estos especialistas en la isla.
Los intensivistas de la isla representan solo el 10% de los especialistas certificados en cuidado crítico en Puerto Rico. Ante este panorama, urge que los futuros médicos del país tomen conciencia sobre la necesidad de especializarse en unidades de cuidados intensivos, pues estos médicos logran que los pacientes sobrevivan una enfermedad crítica en un 30%, reduzcan su estadía hospitalaria en un 30% y logran ahorros al sistema de salud de alrededor de $6.5 millones anuales.
Así lo estipuló la Dra. Gloria Rodríguez Vega, jefa del Departamento de Intensivo del Hospital Hima San Pablo de Caguas en el Día Nacional de la Concienciación de Cuidado Crítico, que se celebra en las facilidades intrahospilarias llevando un mensaje sobre la importancia y el rol de los médicos intensivistas en el cuidado crítico de los pacientes de las unidades de intensivos reduciendo los riesgos de mortalidad y morbilidad de estos centros.
En Puerto Rico solo existen cuatro unidades de intensivo de adultos manejados por estos especialistas, entre las que figuran: Sistema de Salud de Veteranos del Caribe, Hospital Universitario, Hospital Auxilio Mutuo y la red Hima San Pablo.
Los pacientes que necesitan servicios médicos de las unidades de cuidados críticos son aquellos que atraviesan por una cirugía mayor, presentan choque séptico, cardíaco o hipovolémico, fallo respiratorio agudo o crónico, infecciones pulmonares o del tracto urinario, sepsis, fallo renal, condiciones neurológicas, entre otros.
“El médico intensivista recibe entrenamiento y certificación en la subespecialidad de Cuidado Crítico y mientras éste maneja la Unidad de Cuidado Intensivo, está presente proveyéndole cuidado exclusivo a estos pacientes. Precisamente es el mensaje que queremos llevar hoy”, manifestó la especialista a la Revista Puertorriqueña de Medicina y Salud Pública (MSP).
“Los subespecialistas en cuidado crítico se dedican únicamente al cuidado de pacientes críticamente enfermos, muchos de los cuales sufren o están en riesgo de sufrir fallo de uno o más órganos vitales y requieren cuidado intensivo por un período de horas, días o semanas", esbozó.
"Existe una escasez de intensivistas y no hay muchas esperanzas de que estos números aumenten. Las estadísticas recopiladas por la Sociedad de Cuidado Crítico, junto a las proyecciones a largo plazo vaticinan que una severa escasez de intensivistas será evidente para el año 2020”, aseguró.
La Dra. Rodríguez Vega, que dirige un equipo de 11 intensivistas del Hospital Hima San Pablo de Caguas, resaltó que los intensivistas tienen un rol importante dentro de las estrategias médicas que se llevan a cabo para salvarle la vida a estos pacientes.
“Un número creciente de estudios demuestra que éstos especialistas salvan vidas y logran que los pacientes sean dados de alta más temprano y en mejores condiciones. Un estudio publicado en el Journal of the American Medical Association, concluyó que el uso de intensivistas podría reducir las 500,000 muertes que ocurren anualmente en los intensivos y el costo anual de $1.8 billones. El equipo integrado de expertos dedicados consiste de: enfermeras(os) farmacéuticos, médicos, terapistas respiratorios, entre otros profesionales de la salud”, reiteró.
“El no tener un intensivista dedicado a tiempo completo en el cuidado de los pacientes más delicados en el hospital impacta no solo la morbilidad y mortalidad de los pacientes sino también la estadía hospitalaria y los costos asociados a su cuidado. La mayoría de los médicos que se gradúan del programa de cuidado crítico de puerto rico no hacen una práctica de cuidado critico a tiempo completo. Usualmente, hacen una práctica de consultoría de pulmonar y cuidado crítico”, concluyó.
