La quiropráctica es una rama de las ciencias de la salud que se centra en el diagnóstico, tratamiento y prevención de afecciones neuromusculoesqueléticas, especialmente de la columna.
Laura Mojica Ruiz
Agencia Latina de Noticias Medicina y Salud Pública
La medicina del siglo XXI busca educar a las personas y prevenir el desarrollo de múltiples enfermedades y lesiones. Por ello, la quiropráctica es una de las especialidades de la medicina que avanza hacia esta dirección, así lo afirmó el doctor Alex Adorno, director de la Escuela de Quiropráctica de la Universidad Central del Caribe -primera escuela de enseñanza de quiropráctica en Puerto Rico- en diálogo con la Revista Medicina y Salud Pública (MSP).
La quiropráctica es una rama de las ciencias de la salud que se centra en el diagnóstico, tratamiento y prevención de afecciones neuromusculoesqueléticas, especialmente de la columna.
“La quiropráctica es la integración de otras herramientas que nosotros como quiroprácticos utilizamos para manejar un paciente, eso quiere decir que no solamente es un ajuste, sino también cómo impactamos en su diario vivir su nutrición, su aspecto psicológico, la parte de comportamiento psicosocial es bien importante en como manejamos un paciente”,
explicó Adorno durante la entrevista.
En muchas ocasiones esta especialidad puede ser confundida con otras disciplinas del área de la salud como la fisiatría e incluso la fisioterapia. Sin embargo, aunque todas trabajan con el sistema musculoesqueletal la diferencia radica en la forma en la que se manejan los problemas que presenta el paciente, la quiropráctica intenta tratar las afecciones de forma menos invasiva, de forma integral, evitando someter a la persona a procedimientos quirúrgicos.
Durante la entrevista el especialista recordó que la quiropráctica también puede ser utilizada de forma preventiva, no solo en los casos en los que ya existen lesiones, “tenemos un efecto preventivo y está basado en múltiples investigaciones en cómo nosotros podemos prevenir lesiones musculoesqueletales (…) No vamos a evitar un proceso degenerativo, pero podemos desacelerar esos procesos”, afirmó Adorno.
La inclusión de la quiropráctica como técnica preventiva ha ido aumentado con el paso de los años, puede ayudar a mejorar afecciones como dolor de cuello, procesos degenerativos del disco y dolor de espalda baja, cuya incidencia es incluso más alta que la de cáncer de mama y pueden ser causantes de incapacidad. Según el director de la escuela de quiropráctica, el uso de este método como medida preventiva “corrige cualquier tipo de desviación, cambio biomecánico o cambios en el reclutamiento de músculos”, aseguró el especialista.
Por último, Adorno habló del direccionamiento de esta especialidad “la quiropráctica va hacia un proceso de estandarización, crear guías estandarizadas y utilizar una herramienta que es el simulador Force Sensing Table Technology que puede ayudar a medir cuantitativa y cualitativamente las destrezas de los estudiantes en su proceso de formación”.
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