Se estima que las enfermedades gastrointestinales funcionales afectan a más de un 40% de las personas a nivel mundial.
El sobreuso de medicamentos puede afectar la función gastrointestinal o empeorar alguna condición preexistente.
Así lo enfatizó el gastroenterólogo Ekie Vázquez, durante una entrevista exclusiva con el programa Expertos en Salud, programa de la revista Medicina y Salud Pública transmitido semanalmente por MegaTV.
Según Brigham and Women's Hospital “Los medicamentos que se toman por vía oral pueden afectar el aparato digestivo de diferentes formas. Tanto los medicamentos recetados como los de venta libre suelen ser seguros y eficaces, pero, en algunas personas, pueden causar efectos nocivos”.
En opinión del gastroenterólogo, algunas de las modificaciones pueden ser, perder peso, hacer un plan de ejercicio y hacer una dieta es clave para el manejo de los síntomas del reflujo. “Nosotros, los puertorriqueños, comemos mucha cosa que son saludables, pero otras que no tanto”, enfatizó.
“Nosotros, los puertorriqueños, comemos mucha cosas que son saludables, pero otras que no tanto”, enfatizó el especialista, quien detalló las enfermedades gastrointestinales más comunes que afectan a la población y que a razón de los malos hábitos alimenticios se combinan con otras condiciones igual de severas.
Entre las más destacadas se encuentran el hígado graso no alcohólico, hepatitis C, colitis ulcerosa, enfermedad inflamatoria intestinal, enfermedad de Crohn, síndrome de intestino irritable, cáncer de colón, dispepsia (sensación de molestia o llenura) y gases, entre otros.
“Siempre cuando hablamos de reflujo, acidez o gastritis, siempre hay que establecer lo que son las modificaciones en la vida, es lo más importante, claro está los medicamentos nos ayudan a que los pacientes mejoren estos síntomas, pero no queremos dejar a un paciente en medicamentos de por vida”, afirmó.
Por otra parte, y de acuerdo con las nuevas guías de la Sociedad Interamericana de Gastroenterología, se habla sobre un reflujo no complicado, así como de los síntomas de alarma; estos pacientes pueden empezar a utilizar medicamentos como la famotidina y la ranitidina, mientras el paciente tenga una mejora se puede seguir con estos, “no obstante, si el reflujo continúa se pueden utilizar medicamentos más potentes que son los inhibidores de la bomba de sodio y potasio”, dijo Vázquez.
“En algunos casos se puede hacer una combinación de estos medicamentos, y en casos más graves, se pueden también añadir unos protectores de la mucosa del tejido gastrointestinal; este tratamiento siempre se debe hacer con la supervisión adecuada, durante el tiempo prudente y con las dosis necesarias”, así lo comentó el gastroenterólogo.
Funcionamiento del sistema digestivo
Vázquez, explicó que el sistema digestivo se compone desde la boca hasta el ano, al ingerir un alimento, este es procesado en primera parte por la masticación, para luego ser ingeridos y pasar por el esófago hacia el estómago, allí se hacen diferentes procesos bioquímicos, para luego hacer la transición al intestino delgado, en el que se absorben los nutrientes y al final se desechan los desperdicios no aprovechados.
Es usual que dentro del estómago pueda haber cierto contenido que suba hacia la cavidad del esófago, sin embargo, este no debe ser dañino, ni nada que pueda incomodar al paciente, puntualizó. No obstante, cuando ya hay ciertos patrones un poco más exagerados o frecuentes, se recomienda ir con un especialista.
“Usualmente, debe ser algo mínimo, algo que no sea molestoso, que no incomode la calidad de vida del paciente, ya cuando es algo un poco más frecuente, un poco más duradero, o se transforma en algo de más de 3 veces a la semana, o que es algo con todas las comidas, y no con ciertos alimentos, el paciente definitivamente debe buscar ayuda”, enfatizó el Dr. Vázquez.
Enfermedades condicionantes del reflujo
La disfagia o problemas para tragar se dividen en dos grandes categorías, la disfagia orofaríngea y la disfagia esofágica, “los problemas al tragar, pueden surgir al iniciar el tragado, pacientes que hayan tenido algún tipo de problemas vasculares, pacientes que tengan alguna enfermedad degenerativa, pacientes que tengan algún problema a nivel de sistema nervioso central, pueden presentar problemas de disfagia orofaringeal”, explicó.
La disfagia es un signo de alerta, por lo cual se busca evaluar a través de endoscopias, en el caso de estar relacionado con los procesos de tragado, se diagnostica con una videofluoroscopia, o con el procedimiento de tinte para así poder observar el proceso de tragado del paciente.
Por otro lado, aquellos pacientes que presenten problemas con el reflujo constante, pueden desarrollar esofagitis, “que es inflamación en el esófago, y eso puede llevar a diferentes complicaciones como lo que se llama un anillo de Schatzki o un anillo por reflujo, y esos pacientes pueden desarrollar un problema de tragado”.
Entre otros trastornos, se encuentra también la esofagitis, “es una inflamación en el esófago, debido a este reflujo constante y continuo, que cuando es severo puede inflamar las paredes del esófago, nosotros lo podemos observar a través de una endoscopia”, aclaró.
Esta esofagitis puede clasificarse a través de lo observado a través de la endoscopia, según el ELI Clasification, A, B, C o D; siendo D el más severo, puntualizó. Dependiendo de la clasificación de la condición, así mismo, es el tratamiento.
En cuanto al tratamiento, los pacientes que ya padecen de reflujo o acidez, pero es algo esporádico, pueden hacer uso de los medicamentos antireflujo como lo son, agonistas de los distamina, así como los antiácidos de efecto rápido que vienen en pastillas o en su caso líquidos. Estos antiácidos, aunque actúen rápido, también son de poca duración, puntualizó.
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