Investigación sugiere que las mujeres con alta densidad mamográfica tienen mayor probabilidad de desarrollar subtipos tumorales agresivos como HER2+ y triple negativo, especialmente en premenopáusicas y mujeres con sobrepeso.

Un reciente estudio realizado desde el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) ha analizado el impacto de la densidad mamográfica en el desarrollo de los distintos subtipos de cáncer de mama.
Los resultados indican que las mujeres con mayor proporción de tejido fibroglandular —lo que se conoce como alta densidad mamaria— podrían tener más probabilidades de presentar tumores con peor pronóstico.
El trabajo fue liderado por el Centro Nacional de Epidemiología (CNE) y contó con la participación del Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER-ISCIII), además de ocho centros hospitalarios ubicados en distintas regiones de España. Los hallazgos fueron publicados en la revista científica Breast Cancer Research.
Para la investigación se evaluaron 714 mujeres diagnosticadas entre 2014 y 2019 en ocho hospitales de cuatro comunidades autónomas. La información clínica, epidemiológica y patológica se recopiló mediante cuestionarios y revisión de historias médicas.
Del total de pacientes:
69 % presentaron tumores HR+, asociados en general con un mejor pronóstico.
19 % pertenecían al subtipo HER2+, caracterizado por mayor agresividad.
12 % fueron tumores triple negativos, que suelen tener peor evolución y un tratamiento más complejo.
La densidad mamográfica media fue del 26 %, pero las mujeres con niveles superiores al 50 % mostraron una distribución más desfavorable: menos tumores HR+ y un aumento del 36 % en tumores HER2+ y del 23 % en triple negativo, respecto a las mujeres con menor densidad mamaria.
La densidad mamográfica es un factor de riesgo reconocido para el cáncer de mama, y podría influir en el desarrollo de subtipos tumorales de manera diferenciada.
Según explicó Virginia Lope, investigadora del CNE y autora principal del estudio, las asociaciones observadas fueron más evidentes en mujeres pre o perimenopáusicas y en aquellas con sobrepeso u obesidad.
Si bien los resultados son preliminares y requieren más investigación, Lope destaca que una densidad mamaria elevada podría convertirse en un indicador útil para identificar a mujeres con mayor riesgo de desarrollar tumores más agresivos, permitiendo reforzar estrategias de vigilancia clínica y detección temprana.
El cáncer de mama es el tumor más frecuente en mujeres en España, representando cerca del 30 % de los diagnósticos oncológicos femeninos. Se trata de una enfermedad heterogénea, con múltiples subtipos moleculares que determinan el comportamiento clínico, la respuesta al tratamiento y el pronóstico.
HR+: responde mejor a terapias hormonales y presenta mayor supervivencia.
HER2+: tiende a ser más agresivo, aunque ha mejorado su tratamiento gracias a terapias dirigidas.
Triple negativo: suele tener peor evolución y mayores tasas de recaída.
Este estudio contribuye a entender mejor cómo características individuales —como la densidad mamográfica, el peso corporal o el estado hormonal— podrían ayudar a personalizar el seguimiento y la prevención en mujeres con mayor riesgo.