La inversión en la investigación del VIH también ha permitido enormes avances en otros campos de la medicina.
Casi cuatro décadas de estudio han impulsado avances en enfermedades del corazón, hepatitis, cáncer, entre otras.
Desde que se informaron los primeros casos de SIDA en los Estados Unidos hace 37 años, los Institutos Nacionales de Salud han invertido más de 69 mil millones en el tratamiento y la prevención del VIH/SIDA.
Más allá del desarrollo de medicamentos y modalidades innovadoras de prevención, algunas investigaciones han llevado a numerosos avances fuera del campo del VIH, según expertos del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID, por sus siglas en inglés).
En un escrito publicado en la Revista de Enfermedades Infecciosas, el director del NIAID, Anthony S. Fauci, M.D., y su colega Tara A. Schwetz, Ph.D., señalan que investigadores han obtenido información crítica sobre los daños que el VIH puede generar en el sistema inmunológico.
Los científicos ahora entienden el rol importante que juegan las células T-CD4 -células inmunes que el VIH infecta y destruye selectivamente - para frustrar otras enfermedades infecciosas y ciertos cánceres. Estudiar el curso de la infección por VIH ha fomentado la comprensión de la activación inmune e inflamación persistente que puede aparecer en otras enfermedades.
Por ejemplo, los investigadores informaron que la inflamación condujo a un mayor riesgo de enfermedad cardíaca en las personas que viven con el VIH, lo que provocó una mayor investigación sobre el rol de la inflamación en las enfermedades del corazón, independientemente del estado serológico.
Asimismo, la investigación ha proporcionado información sobre la presencia de otras enfermedades, además de la primaria, asociadas con el VIH, como la enfermedad renal, el cáncer y la tuberculosis.
El estudio, que se ha centrado en los tratamientos y las vacunas contra el VIH, ha cosechado otra gran variedad de beneficios. Los esfuerzos por desarrollar terapia antirretroviral para el VIH proporcionan un modelo para el desarrollo de fármacos, que se ha aplicado al descubrimiento de otros medicamentos antivirales. Como en el caso de los antivirales de acción directa que pueden curar la infección por el virus de la hepatitis C.
Al mismo tiempo, se están explorando técnicas desarrolladas para el descubrimiento de anticuerpos ampliamente neutralizantes y vacunas candidatas que inducen anticuerpos contra el VIH y que combaten otras enfermedades virales como el Ébola, el Zika y la gripe. Además, los estudios centrados en la estructura molecular del VIH han dado paso a una era de diseño de vacunas basado en la estructura.
De acuerdo con los expertos, estos y otros ejemplos indican que la investigación sobre el VIH/SIDA ha tenido y continúa teniendo un gran impacto más allá de este único patógeno.
