Una de las principales preocupaciones que aqueja al personal médico en una sala de urgencias son las arritmias cardíacas. Éstas ocurren cuando los impulsos eléctricos que coordinan los latidos cardíacos
César Fuquen Leal
Agencia Latina de Noticias de Medicina y Salud Pública
Una de las principales preocupaciones que aqueja al personal médico en una sala de urgencias son las arritmias cardíacas. Éstas ocurren cuando los impulsos eléctricos que coordinan los latidos cardíacos, no funcionan adecuadamente. La razón por la que se generan estas reacciones, se debe a su difícil diagnóstico y atención, condiciones que incluso podrían desencadenar la muerte del paciente.
Jhoan Sebastián Roncancio Muñoz, médico, internista de la Universidad Nacional de Colombia y Fellow en Cardiología de la Universidad El Bosque de este mismo país, sostuvo una conversación con la Revista Medicina y Salud Pública, donde expuso el proceso médico que se le da en las salas de urgencia a los pacientes que presentan alguna arritmia cardíaca.
En general las arritmias cardiacas como son tan variables en la presentación clínica, digamos que es algo bizarra porque el paciente puede debutar con una sintomatología que es atípica y no es característica de una arritmia en especial. Cuando el médico se enfrenta a ella en urgencias, toma el trazado electrocardiográfico y va a haber una serie de confusiones respecto a cuál es el ritmo y digamos que el médico se va a enfocar en buscar y tratar de identificar claramente cuál es el ritmo, cosa que es muy difícil de hacer” afirma el galeno.
Existe una variada clasificación de arritmias, las cuales tienen síntomas y tratamientos diferentes, en ese sentido las más recurrentes en las salas de urgencias están relacionadas a: “En el proceso de búsqueda del diagnóstico etiológico, el diagnóstico específico, se va a encontrar un paciente que puede cursar con una arritmia tipo fibrilación auricular, ya sea que se conocía previamente o que está debutando de nuevo” comenta el Dr. Roncancio.
Los médicos deben realizar una serie de procedimientos para estabilizar al paciente y proceder a la toma de decisiones. Esto se realiza para entender cómo proceder dependiendo del tipo de arritmia al que se enfrenten. “Lo primero es estabilizar al paciente, si logramos estabilizar al paciente nos da mucho tiempo adicional, en el cual podemos tomar decisiones no solo de manera individual, sino ya en conjunto con el especialista, no solo de medicina interna, de cardiología, de electrofisiología, dependiendo el nivel de complejidad con el que nos encontremos. Después de estabilizar al paciente logramos a veces mejorar la identificación del mismo y dar terapia oral que nos permite controlar el tipo de arritmia que tiene” expresa el internista.
Cuando los profesionales de la salud se encargan de revisar este tipo de anomalías cardíacas, se tienen en cuenta diversos factores relacionados con el ritmo cardíaco, el estado físico y la presión arterial, todos estos sirven para brindarle al paciente el tratamiento adecuado para tratar su arritmia. “Aunque las claves sean difíciles de interpretar con el trazado que hemos hablado como que el ritmo sea irregular, que el paciente tenga una alternancia eléctrica en el complejo QRS, simplemente con esas claves uno ya hace el diagnóstico y redirige el tratamiento dependiendo de la estabilidad clínica, pero es muy importante tener en cuenta esas pequeñas claves que hacen la diferencia a la hora de hacer el diagnóstico de la arritmia” precisa el especialista.
Las arritmias pueden ser generadas por diversos factores determinantes en el padecimiento de esta condición, el principal está relacionado con la edad. “Digamos –que las arritmias- tienen varios mecanismos fisiopatológicos, pero durante el envejecimiento del corazón, una de las principales causas es que el sistema de conducción tiende a generar fibrosis, las células no se reponen, no se recuperan y genera entonces enfermedad cardíaca estructural”, explica el Dr. Roncancio.
De acuerdo con el especialista, en los pacientes mayores se pueden encontrar arritmias con tasas de prevalencia tan altas como del 10 al 20%, todo depende del grado de compromiso del corazón. Éstas son las que mayormente se relacionan con el riesgo de muerte súbita.
Precisamente en ese contexto es que usamos medidas de prevención como implante de desfibrilador, tratando de prevenir la muerte súbita de origen cardiovascular, en el paciente que ya tiene enfermedad cardiovascular establecida con unas características especiales (…) En el contexto de un paciente que tiene un corazón normal, se relaciona más con anomalías genéticas o alteraciones en los canales de sodio y de potasio que alteran el potencial de acción y de esta manera desencadena las arritmias” señala el médico. En ese sentido, la prevalencia en la población general con este tipo de arritmias tipo taquicardia ventricular en corazón sano, suelen ser menor al 0.1% debido a que comprometen algún patrón genético o heredable.
Las bradicardias son la arritmia más frecuente a nivel mundial y es mayormente causada por el envejecimiento del corazón y de todo el sistema de conducción. “La segunda causa más frecuente es la enfermedad coronaria, es decir que alguna arteria del corazón, sobre todo la arteria coronaria derecha que es la que se encarga de irrigar los nódulos, se suele tapar o suele tener lesiones ateromatosas que disminuyen el flujo sanguíneo y crónicamente va produciendo una lesión que termine en una destrucción total del sistema de conducción” comenta el especialista Roncancio.
El tratamiento más efectivo para tratar las arritmias cardíacas es la implantación de un marcapasos, un instrumento que ayuda significativamente en el alivio de esta condición. “Ni siquiera hay un fármaco tradicional o no tradicional que pueda suplementar la implementación de un marcapasos, así mismo con las taquicardias ventriculares, como son mecanismos de reentrada, ya sea por existencia de gases anómalos o de una conducción anómala a nivel del corazón, pues en general la medicina tradicional sigue siendo hoy en día todavía lo que es el Gold estándar del tratamiento de estos pacientes” concluye el médico internista y especialista Jhoan Roncancio en entrevista con la Revista Medicina y Salud Pública.
Como se evidenció, las arritmias cardíacas podrían generar pánico tanto en el personal médico, como en el paciente; pero si se implementan los procedimientos adecuados desde que la persona ingresa a la sala de urgencias, hasta que pasa por la valoración del especialista, posiblemente se podrá salvar la vida de un ser humano y la arritmia pasará a ser un simple susto.