Alex Singleton, de 31 años, descubrió que tenía cáncer testicular gracias a una prueba de rutina de la NFL.
Alex Singleton pensó que el sobre marcado como "confidencial" en su casillero contenía malas noticias. No se equivocó, pero tampoco imaginó hasta dónde llegaría su pesadilla ni qué tan rápido se convertiría en una historia de superación.
El linebacker de 31 años de los Denver Broncos descubrió el 29 de octubre que tenía niveles elevados de la hormona hCG en su sistema. Una búsqueda rápida en Google le dio dos opciones: o estaba consumiendo sustancias prohibidas o tenía cáncer testicular. "Estoy un poco asustado", recuerda haber pensado mientras salía a una reunión del equipo.
Lo que siguió fue un mes que Singleton describe como "emotivo" pero también transformador. Diagnosticado oficialmente el 3 de noviembre, jugó tres días después contra los Las Vegas Raiders con la certeza de que podría ser su último partido profesional. Al día siguiente, se sometió a cirugía para extirpar el tumor.
La detección del cáncer fue completamente fortuita. Una prueba antidopaje de rutina de la NFL, tomada el 13 de octubre —un día después de que Denver venciera a los New York Jets en Londres— mostró la anomalía hormonal. Sin ese control aleatorio, Singleton probablemente no habría descubierto la enfermedad hasta que fuera demasiado tarde.
"Mi mayor temor era que me quitaran este juego, no en mis propios términos", explicó el co-capitán de los Broncos a BBC Sport. "No quería que Houston fuera mi último partido por lo que me iba a pasar después".
Entre el diagnóstico y la cirugía, Singleton enfrentó días de incertidumbre mientras los médicos determinaban si el cáncer se había extendido a otras partes de su cuerpo. Pero su única obsesión era clara: jugar el partido del jueves por la noche contra Las Vegas.
La cirugía de cáncer testicular normalmente requiere seis semanas de recuperación sin levantar objetos pesados ni hacer ejercicio intenso. Singleton necesitó menos de un mes para volver a liderar la defensa más destructiva de la NFL.
Tres días después de la operación, el 10 de noviembre, reveló públicamente su situación a compañeros y medios. Se perdió apenas un partido —la victoria crucial sobre los Kansas City Chiefs— antes de aprovechar la semana de descanso del equipo para recuperarse.
El 24 de noviembre regresó al campo contra los Washington Commanders. En el último cuarto, rompió una jugada clave que ayudó a Denver a ganar en tiempo extra. Cuando un reportero le preguntó cómo se sentía, Singleton respondió que trataría de no llorar. No pudo cumplir esa promesa.
"Muchos chicos y entrenadores del otro equipo dijeron 'hemos estado pensando en ti, hemos estado rezando por ti'", recordó. "Eso demostró lo cerca que está esta liga. Realmente significó mucho para mí, que sea más grande que el fútbol".
Con 95 placajes esta temporada, Singleton lidera a los Broncos en ese rubro y ha convertido su experiencia en una plataforma para concientizar sobre la salud masculina. El cáncer testicular es más común en hombres de 15 a 49 años y, según el NHS británico, a menudo es tratable cuando se detecta a tiempo.
"Soy un ejemplo perfecto de cómo, en 24 días, puedes volver a estar completamente 100% sano", afirmó. "No tiene que ser la cosa más aterradora del mundo. Se puede curar rápidamente".
El linebacker ha recibido mensajes de personas que decidieron hacerse chequeos médicos después de escuchar su historia. Para él, eso es tan importante como cualquier estadística en el campo.
"He aprendido mucho sobre ser vulnerable, sobre poder hablar de ello", reflexionó. "No tengas miedo de ser vulnerable porque todo lo que hará es construir relaciones más fuertes".
