Lo destacado del caso es que este tipo de linfoma no se presenta en pacientes con VIH negativo.
Aunque el linfoma de Hodgkin aislado de médula ósea es un cuadro muy raro, especialmente en pacientes VIH negativos, el manejo que le dieron al paciente de este caso estableció un nuevo manejo para los pacientes, el cual consiste en un protocolo de quimioterapia convencional para el linfoma de Hodgkin.
El linfoma de Hodgkin es un tipo de neoplasia linfoide caracterizada por la presencia de células de Reed-Sternberg en la histopatología. Se presenta con ganglios linfáticos inflamados y, en casos avanzados, puede afectar la médula ósea.
La afectación aislada y primaria del linfoma de Hodgkin en la médula ósea es una presentación muy rara, especialmente en un paciente VIH negativo, y tiene una alta tasa de mortalidad, incluso con un manejo adecuado.
En esta oportunidad se trata de un paciente masculino de 36 años se presentó con una historia de 6 meses de escalofríos, sudores nocturnos y debilidad generalizada. Las investigaciones de laboratorio mostraron pancitopenia.
Comenzó con quimioterapia convencional para el linfoma de Hodgkin y recibió el primer ciclo de ABVD (adriamicina, bleomicina, vinblastina y dacarbazina) durante su hospitalización. Mientras tanto presentaba fiebre sin foco, siendo manejado empíricamente con tratamiento antibiótico de amplio espectro (piperacilina-tazobactam).
La hospitalización duró 2 semanas. Continuó recibiendo otros ciclos de forma ambulatoria, con buena respuesta clínica. De acuerdo a la investigación y seguimiento, el paciente permaneció en remisión completa después de 2 años.
Un frotis de sangre periférica fue normal. Una biopsia de médula ósea reveló células de Reed-Sternberg, compatibles con linfoma de Hodgkin. Las imágenes adicionales no mostraron adenopatías y el bazo era normal. Por lo tanto, el linfoma de Hodgkin primario de la médula ósea se diagnosticó en el estadio IV, con una puntuación de pronóstico internacional de 5 posibles factores desfavorables.
Es importante señalar, que hay muy pocos casos reportados de médula ósea primaria de linfoma de Hodgkin, y la mayoría de los informes fueron de personas con VIH positivos o estaban asociados con EBV, que se encuentra en todos casos de pacientes VIH con linfoma de Hodgkin, indicando su papel en la patogenia. "Nuestro caso fue negativo para ambos, lo que era un escenario muy raro", escribieron.
En resumen, el linfoma de Hodgkin de médula ósea aislado es muy raro y tiene una alta tasa de mortalidad, pero según los resultados de este estudio, el tratamiento con quimioterapia convencional podría ser eficaz y puede estar asociado con una mejor supervivencia. Además, el tratamiento precoz de una posible sepsis con los antibióticos de amplio espectro podrían ser útiles.
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