Las personas cercanas a un fumador tienen mayor riesgo de este tipo de cáncer en comparación con la población general.
El cáncer de pulmón es uno de los más agresivos y mortales debido a la ausencia de síntomas, que se presentan generalmente cuando el tumor está en etapas avanzadas. Según cifras de la Sociedad Estadounidense del Cáncer, se estima que para el 2022, en los EE. UU, se detecten 236.740 nuevos casos de cáncer de pulmón y fallezcan unas 130.180 personas a causa de esta enfermedad.
Sobre eso, el Dr. Luis Delgado, director del Hospital Oncológico Dr. Isaac González, Martínez, en diálogo con la Revista Medicina y Salud Pública, explicó los principales factores de riesgo para desarrollarlo, siendo uno de ellos el consumo de tabaco o cigarrillo, sin embargo, no solo las personas que fuman tienen riesgo sino también quienes están en entornos cercanos o comparten con el paciente fumador.
“El tabaquismo sigue siendo la causa principal de cáncer de pulmón en todas sus manifestaciones y sobre esto hay otros hábitos asociados que aumentan el riesgo. Eso lo podemos modificar, si educamos a la población y se dejan de lado estos hábitos, se reduciría el riesgo no solo de la persona que fuma, sino de los famosos fumadores de segunda mano, los compañeros cercanos que conviven con un fumador activo” afirmó el especialista.
En ese sentido, añadió que la persona que está conviviendo con un fumador recibe el mismo impacto en los pulmones, y aunque tiene menor riesgo que el propio fumador, está más expuesto a tener la enfermedad en comparación con una persona que no fuma.
Otro punto importante es el hecho de que existen pacientes diagnosticados que no dejan de fumar, debido a que ya tienen la condición. Sobre eso, el Dr. Delgado explicó que aunque prácticamente no hay estudios controlados que evalúen el efecto de dejar de fumar en pacientes que ya tienen cáncer de pulmón, si existen estudios con un número considerable de pacientes donde se ha evidenciado que el dejar de fumar reduce la posibilidad de muerte en pacientes que abandonan el hábito.
“En Rusia se llevó a cabo un estudio retrospectivo que demostró que los pacientes que dejaban de fumar tenían una sobre vida mayor, es decir, una reducción en la posible tasa de mortalidad de casi un 15 %” señaló.
Asimismo, los beneficios que genera el dejar de fumar incluyen la disminución de desarrollar un segundo tumor, evitar más daño al sistema pulmonar, padecer de otras enfermedades crónicas que pueden comprometer la sobre vida y limitar el riesgo de presentar tumores a causa del consumo de tabaco.
Otros factores de riesgo están asociados a la exposición a sustancias del ambiente, como el radón, el arsénico, y el asbesto, que pueden propiciar el desarrollo de algún tipo de malignidad en el pulmón, que se vuelve difícil de tratar, según el especialista.
Sobre el diagnóstico y tratamiento para este tipo de tumor, el Dr. Luis Delgado refiere que es un reto para la familia, el paciente y los médicos, sin embargo, hoy día existen diversas alternativas que, dependiendo el diagnóstico y el estadio el cáncer, se pueden abordar.
Al respecto, explicó que, “en estadios bien tempranos la cirugía siempre es la opción, cuando lamentablemente el paciente no es candidato quirúrgico, existen alternativas de quimioterapia, radioterapia y de tratamientos combinados. En casos más avanzados, incluimos medicamentos que han hecho la diferencia en el tratamiento contra el cáncer de pulmón”.
Los principales avances en tratamientos están orientados a modernos medicamentos que afectan específicamente las mutaciones de las células tumorales en áreas de crecimiento celular, evitando la progresión de la enfermedad.
Sobre ello, el médico expresó que “usualmente las personas diagnosticadas que no fuman, pueden beneficiarse con las terapias de Target Therapies y obtener mejores resultados, que los fumadores”.
Además, indicó que en los últimos 5 años han visto el repunte de la inmunoterapia que les ha permitido a los oncólogos brindar nuevos tratamientos efectivos no solo para el cáncer de pulmón, sino otros tumores y las personas que responden bien a la inmunoterapia, generalmente tienen un mayor control de la enfermedad, en comparación con otras terapias.
“En Puerto Rico tenemos un número adecuado de oncólogos que están al día con las terapias nuevas y tenemos la disponibilidad de estas terapias; donde quizás tenemos un poco de dificultad es en estadios tempranos, en los cuales recomendaríamos cirugía y es porque no tenemos tantos cirujanos cardio torácicos en la Isla”, puntualizó el especialista.
Finalmente, invitó a la población a estar alerta a los síntomas asociados a este tipo de cáncer y “si el paciente presenta tos persistente, falta de aire, dolor constante en el pecho que no tiene origen cardiaco, hay que buscar ayuda y chequearse, porque mientras más temprano se diagnostiquen estas condiciones, mayor va a ser la sobre vida”.
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