La información fue compartida y expuesta por expertos en la reunión anual de la Sociedad estadounidense de Oncología Clínica (ASCO, por sus siglas en inglés).
La Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica (ASCO) celebró su reunión anual, donde se presentaron importantes avances en el tratamiento de varios tipos de cáncer. Destacaron estudios sobre cáncer de pulmón, glioma, cáncer rectal y linfoma de Hodgkin, proporcionando esperanzas renovadas para los pacientes afectados por estas enfermedades.
Cáncer de pulmón: un medicamento que prolonga la supervivencia
Investigadores del Centro Oncológico de Yale revelaron que el fármaco osimertinib, utilizado desde hace tres años para tratar un subtipo específico de cáncer de pulmón, puede prolongar la supervivencia en pacientes sometidos a cirugía para extirpar el tumor. Este medicamento se dirige a las células cancerosas que presentan una mutación en el gen EGFR, común en el cáncer de pulmón de células no pequeñas. El estudio mostró que el 85% de los pacientes tratados con osimertinib sobrevivió hasta cinco años, en comparación con el 73% en el grupo de placebo.
Glioma sin quimioterapia
El glioma, un tipo de cáncer cerebral, ha sido objeto de estudio en la búsqueda de terapias efectivas y seguras. Investigadores del Memorial Sloan Kettering Cancer Center evaluaron el vorasidenib, un fármaco dirigido, que demostró reducir en un 61% el riesgo de progresión de la enfermedad o muerte en pacientes con glioma de bajo grado. Además, el tratamiento evitó la necesidad de recurrir a terapias más tóxicas como la quimioterapia y radioterapia, lo cual es especialmente relevante para los pacientes jóvenes que padecen esta enfermedad.
Cáncer rectal: una nueva forma de tratamiento
En el caso del cáncer colorrectal, los tumores rectales representan aproximadamente un tercio de los casos. Científicos del Memorial Sloan Kettering Cancer Center demostraron que tanto la quimioterapia y radioterapia, como solo la quimioterapia, pueden lograr resultados similares en términos de supervivencia y curación después de cinco años de tratamiento. Estos hallazgos rompen con los paradigmas establecidos hace 20 años y sugieren que la radioterapia puede ser necesaria solo para ciertos individuos, mientras que otros pueden beneficiarse únicamente de la quimioterapia.
Linfoma de Hodgkin: un cambio en el enfoque del tratamiento
El linfoma de Hodgkin, un tipo de cáncer que afecta a las células del sistema inmunitario, suele manifestarse en personas jóvenes. En los estadios avanzados, el tratamiento estándar incluye quimioterapia y el fármaco brentuximab vedotin. Sin embargo, expertos del Centro Médico City of Hope probaron una combinación de quimioterapia con nivolumab, un tipo de inmunoterapia que estimula el sistema inmunitario del paciente para combatir las células cancerosas.
Los resultados preliminares mostraron que el 94% de los pacientes tratados con nivolumab seguía con vida después de 12 meses, en comparación con el 86% en el grupo que recibió brentuximab vedotin. Este estudio histórico también incluyó a voluntarios jóvenes a partir de los 12 años y demostró una mayor tolerancia a los efectos secundarios con el uso de nivolumab.
Estos avances en el tratamiento del cáncer ofrecen nuevas esperanzas a los pacientes y sugieren un cambio en la forma de abordar y tratar estas enfermedades. A medida que se desarrollan terapias más específicas y se estudian combinaciones terapéuticas innovadoras, se vislumbra un futuro prometedor en la lucha contra el cáncer.
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