Cuando el cáncer de pulmón se diagnostica en etapas iniciales, las probabilidades de supervivencia a cinco años ascienden al 60 %.
En los últimos años, la tasa de supervivencia del cáncer de pulmón ha mostrado varios avances gracias a mejoras en el diagnóstico temprano y los tratamientos innovadores.
Según un informe de Roche Farma, la supervivencia global a cinco años ha aumentado al 20 % en los casos detectados precozmente. Sin embargo, la mayoría de los diagnósticos (60 %) aún se realizan en estadios avanzados, donde las tasas de supervivencia caen drásticamente al 3 %.
Este tipo de cáncer sigue siendo el tercero más diagnosticado —tras los de mama y colorrectal— y el primero en mortalidad.
El Dr. Bartomeu De Castro, jefe de Oncología Médica del Hospital Universitario La Paz, explicó que cuando el cáncer de pulmón se diagnostica en etapas iniciales, las probabilidades de supervivencia a cinco años ascienden al 60 %.
Este logro se atribuye a la implementación de cribados poblacionales, avances en inmunoterapias y tratamientos dirigidos, así como a la concienciación sobre la detección precoz. A pesar de ello, De Castro advierte que es fundamental continuar impulsando estrategias para identificar los casos en fases tempranas, reduciendo la brecha entre diagnóstico y tratamiento oportuno.
El aumento de la supervivencia plantea nuevos desafíos en la atención integral de los pacientes. Muchos enfrentan secuelas físicas a largo plazo, como fatiga crónica, dificultad para respirar, dolor persistente y complicaciones metabólicas. Estas condiciones pueden afectar gravemente la calidad de vida.
En el ámbito psicológico, se estima que alrededor del 40 % de los supervivientes experimenta trastornos como ansiedad, depresión y estrés postraumático.
La psicóloga clínica Tania Estapé, dice que la gestión emocional debe ser parte esencial del seguimiento médico. Según Estapé, "superar el cáncer no solo implica vencer la enfermedad desde un punto de vista médico, sino también afrontar las secuelas psicológicas que esta deja en los pacientes y sus familias".
El informe de Roche Farma propone redefinir el término "superviviente" del cáncer de pulmón, dividiendo el proceso en tres etapas:
1. Supervivencia aguda: Desde el diagnóstico hasta el final del tratamiento inicial.
2. Supervivencia extendida: Durante el período de remisión y seguimiento médico.
3. Supervivencia prolongada: Cuando la enfermedad se cronifica o ya no está presente.
Esta clasificación busca ajustar los modelos de atención sanitaria para responder mejor a las necesidades específicas de cada fase.
Federico Plaza, director de Corporate Affairs de Roche Farma España, señala que "la cronificación del cáncer de pulmón es uno de los mayores avances que hemos visto, pero conlleva nuevos retos".
Estos incluyen la necesidad de un seguimiento más cercano, la coordinación con Atención Primaria y el desarrollo de modelos de cuidado que prioricen la calidad de vida del paciente.
Aunque los avances en la supervivencia son alentadores, los expertos coinciden en que aún queda mucho por hacer para optimizar el manejo integral del cáncer de pulmón, tanto en términos médicos como sociales.
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