Son esferas microscópicas de hidrogel, con un diámetro aproximado de 30 micras, diseñadas para sobrevivir en los fluidos corporales y ser completamente absorbidas sin generar efectos adversos.
Este sistema, probado en un modelo animal, ha demostrado resultados que se consideran buenos y confiables en la entrega de terapias en órganos/lugares específicos del cuerpo, particularmente en el tratamiento de tumores.
Investigadores del Instituto de Tecnología de California (Caltech) han desarrollado microrobots biorreabsorbibles, que estarían ayudando a evolucionar la administración de fármacos de manera precisa y dirigida.
Denominados BAM (Bioresorbable Acoustic Microrobots), son esferas microscópicas de hidrogel, con un diámetro aproximado de 30 micras, diseñadas para sobrevivir en los fluidos corporales y ser completamente absorbidas sin generar efectos adversos.
Una de las características más importantes de esta tecnología, es la incorporación de nanopartículas magnéticas, que permiten la manipulación de los microrobots mediante campos magnéticos externos, dirigiéndolos hacia ubicaciones específicas dentro del organismo.
El estudio preclínico realizado en ratones con tumores de vejiga demostró que la administración dirigida de fármacos a través de estos microrobots es más efectiva que las técnicas convencionales de entrega de medicamentos.
Los investigadores administraron el fármaco en cuatro sesiones a lo largo de 21 días, con resultados notoriamente superiores en la reducción del tumor en comparación con la administración sistemática del mismo tratamiento.
Según el profesor Wei Gao, uno de los principales autores del estudio, esta tecnología tiene un enorme potencial como plataforma para la entrega controlada de diversos tipos de cargas terapéuticas.
La capacidad de guiar estos microrobots directamente al sitio tumoral y liberar el medicamento de manera eficiente es una buena noticia en la investigación y para pacientes que necesitan de tratamientos más precisos y dirigidos.
La eficacia de los microrobots en la reducción de tumores y su capacidad de administrar tratamientos sin efectos secundarios significativos marcan un nuevo avance en el desarrollo de la nanomedicina.
Además, la naturaleza biorreabsorbible de los microrobots elimina la necesidad de procedimientos adicionales para su eliminación del cuerpo, lo que refuerza su viabilidad y seguridad en el contexto clínico.
Los investigadores han expresado su optimismo por el futuro de esta tecnología, anticipando que en los próximos años podría comenzar la fase de pruebas en humanos.
Esta innovación abre nuevas posibilidades en el tratamiento de diversas condiciones médicas, especialmente en el tratamiento de cáncer, donde la precisión y la eficacia de la entrega de fármacos son esenciales para mejorar los resultados terapéuticos.
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