Acusan al HHS de violar normas legales y debilitar la confianza pública en las vacunas.
Varios destacados organismos médicos —incluyendo la Academia Americana de Pediatría, el Colegio Americano de Médicos y la Asociación de Salud Pública— junto a una mujer embarazada, presentaron el lunes 7 de julio de 2025 una demanda contra el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) y su secretario, Robert F. Kennedy Jr.
El reclamo, puesto ante el Tribunal de Distrito en Massachusetts, alega que la modificación unilateral de las recomendaciones federales sobre la vacuna COVID-19 para niños sanos y mujeres embarazadas propone una acción "arbitraria, caprichosa e ilegal" y viola la Ley de Procedimiento Administrativo .
La demanda solicita medidas judiciales urgentes, incluyendo una orden preliminar y permanente para suspender el nuevo protocolo y un juicio declarativo que lo invalide . Los demandantes sostienen que esta decisión genera confusión entre los pacientes, debilita la confianza en el esquema de vacunación y pone en riesgo la salud pública .
En mayo, Kennedy emitió una directiva que retiraba la recomendación de la vacuna COVID-19 para niños y mujeres embarazadas del calendario del CDC, sin el aval del grupo asesor independiente —el Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización (ACIP)— al que sustituyó por un panel que incluye miembros con posturas antivacunas . Según los demandantes, este procedimiento ignora criterios científicos y normas legales establecidas por décadas ().
Entre los firmantes se encuentran también la Sociedad para Medicina Materno-Fetal y la Alianza de Salud Pública de Massachusetts, junto con una médica embarazada que teme enfrentar barreras de acceso a la vacunación COVID-19 para ella o su hijo .
El HHS ha defendido la medida, asegurando que "el secretario respalda sus reformas del CDC" y promueve una "integridad científica y transparencia" en la toma de decisiones .
Con esta acción legal, se busca revertir la directiva y restablecer un proceso de decisión basado en evidencia y revisión pública, para proteger la confianza en las vacunas y la salud de grupos vulnerables.
La decisión de Kennedy provocó creciente preocupación entre expertos por el aumento de enfermedades prevenibles como la gripe y el sarampión, justo cuando EE.UU. enfrenta su mayor brote de sarampión en tres décadas ().
La remoción completa del panel ACIP por parte de Kennedy es parte de una estrategia más amplia de remodelación que ha alarmado a la comunidad médica .