La relación entre la gota y comorbilidades es independiente de los niveles de ácido úrico

La diabetes mellitus se correlacionó negativamente con los niveles de ácido úrico en suero.

Luisa Ochoa

    La relación entre la gota y comorbilidades es independiente de los niveles de ácido úrico

    La asociación entre la gota y las comorbilidades cardiometabólicas fue independiente del urato sérico, lo que sugiere mecanismos independientes del urato sérico, como la inflamación provocada por el depósito de cristales, el genotipo proinflamatorio o factores dietéticos no purínicos.

    Los investigadores encontraron que las comorbilidades cardiovasculares y la enfermedad renal crónica se asocian con un aumento de los niveles de ácido úrico en suero en pequeños incrementos. Mientras que la diabetes mellitus tiene una correlación negativa con los niveles de ácido úrico en suero.

    Por lo que el resultado es que la asociación entre la gota y las comorbilidades cardiovasculares, la diabetes mellitus y la hipercolesterolemia es independiente de los niveles de ácido úrico en suero.

    ¿Qué pasa cuándo el ácido úrico está alto?

    Un alto nivel de ácido úrico, o hiperuricemia, es un exceso de ácido úrico en la sangre. El ácido úrico se forma durante la descomposición de purinas, que se encuentran en ciertos alimentos y también las produce el cuerpo.

    Una vez producido, la sangre transporta el ácido úrico y este pasa por los riñones, donde la mayor parte se filtra y se convierte en orina.

    Aproximadamente una de cada cinco personas tiene un nivel de ácido úrico alto. Esto puede estar relacionado con crisis de gota o el desarrollo de cálculos renales. La mayoría de las personas con niveles de ácido úrico altos no tienen ningún síntoma ni problemas relacionados.

    Es importante mencionar que durante un análisis de sangre, los valores normales de ácido úrico deben situarse entre 3,5 y 7,2 para el hombre y 2,5 y 6 mg/dl para la mujer. 

    El sobrepasar estas cifras será motivo de una exploración médica más a fondo para establecer las causas o la posible existencia de una enfermedad asociada. En cualquier caso, requerirá un tratamiento dietético e incluso farmacológico.

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