El Centro Médico Episcopal San Lucas de Puerto Rico fue el lugar donde se llevó a cabo por primera vez en Latinoamérica la creación de una fístula endovascular para diálisis. Este procedimiento consiste en realizar una conexión quirúrgica de una arteria directamente a una vena, que actúa como un puente para que la sangre entre en la máquina de hemodiálisis del paciente con problemas renales.
Ingerny Polanco
Agencia Latina de Noticias de Medicina y Salud Pública
El Centro Médico Episcopal San Lucas de Puerto Rico fue el lugar donde se llevó a cabo por primera vez en Latinoamérica la creación de una fístula endovascular para diálisis. Este procedimiento consiste en realizar una conexión quirúrgica de una arteria directamente a una vena, que actúa como un puente para que la sangre entre en la máquina de hemodiálisis del paciente con problemas renales.
La intervención liderada por el Dr. Félix Pérez Ramos, nefrólogo intervencional y médico vascular, quien estuvo acompañado de un equipo conformado por técnicos de radiología, enfermeras, un técnico de sala y los anestesiólogos. Pero, es importante destacar que antes de realizar el procedimiento participa un sonografista vascular, que es quien hace una evaluación junto al doctor para determinar si los pacientes son candidatos.
“Fueron operados dos pacientes de diálisis, ellos tenían catéter y hubo que realizarle una fístula lo antes posible para disminuir la mortalidad. Actualmente, ambos están bien, no les duele el brazo y la fístula está funcionando de manera correcta. Luego de la intervención lo que procede es verlos en dos semanas y después en cuatro semanas, una vez me aseguren que todo esté fluyendo para comenzar a usar la fístula para diálisis”,
explicó el Dr. Félix Pérez Ramos, en una entrevista exclusiva con la Revista Medicina y Salud Pública (MSP).
De acuerdo al especialista, las ventajas de este procedimiento es que requiere menos intervención para el paciente comparado con una fístula que se crea de una forma quirúrgica abierta. Además, las complicaciones son mucho menores y a la hora de que la fístula funcione necesita menos intervenciones comparado con una fístula quirúrgica. Esto representa una ventaja tanto para los nefrólogos como para los pacientes, e inclusive para los planes médicos.
Además, puntualizó que se ha demostrado que más del 90% de los procedimientos realizados con la fístula endovascular resultan exitosos exitosa, mientras que con la la fístula tradicional, dependiendo el área, pueden llegar hasta un 50% de fallo; lo que significa que de dos intervencion es que se realizan, una no funciona.
Según explica el galeno, para mantener las fístulas quirúrgicas se requieren de 3 a 4 veces más procedimientos que lo que requiere la endovascular. Además de eso, está la maduración; que en la endovascular se puede comenzar a utilizar de 4 a 6 semanas después de haberse realizado, mientras que en la quirúrgica hay que esperar de 3 a 4 meses. Esto sumado a que la endovascular es menos costosa y más estética, no se ven cicatrices ni aneurismas en el paciente.
“En definitiva, lo importante de la fístula endovascular es que disminuye la mortalidad de los pacientes de diálisis, les proporciona una mejor calidad de vida. Al realizarla de forma endovascular el paciente tiene que asistir menos veces al quirófano para hacer una intervención. Por ello, se pronostica que más de la mitad de los procedimientos futuros serán realizados, porque es ambulatorio, no hay suturas, no hay inflamación, el paciente no se da cuenta que en el brazo se le realizó el procedimiento y es algo que uno quiere, uno quiere salir del quirófano como si nada hubiera pasado”,
concluyó el Dr. Pérez.
Si usted o alguna persona cercana es paciente de diálisis o tiene una función renal de un 20% o menos, puede contactar al Dr. Félix Pérez Ramos y a su equipo, a los teléfonos 787-239-1295 y 787 971 7134; o escribir al correo electrónico info@southeastrenal.net