Determinar si un paciente con stroke es candidato a trombolisis o trombectomía requiere precisión clínica y un manejo coordinado.

El manejo temprano del accidente cerebrovascular (stroke) continúa siendo uno de los mayores retos en las salas de emergencia del país. Así lo explicó, en exclusiva para la Revista MSP, el Dr. Wilfredo Gutiérrez, presidente del Colegio de Emergenciólogos de Puerto Rico, quien detalló los pilares clínicos que determinan el pronóstico del paciente desde su llegada al hospital.
Según el especialista, la atención del stroke es un proceso “multidisciplinario”, que inicia desde el momento en que el paciente se registra en el área de triage. “Una alta sospecha clínica es lo que va a dirigir el cuidado del paciente de la manera adecuada en la sala de emergencia”, señaló.
Tras la evaluación inicial por enfermería, el médico debe realizar una historia clínica dirigida, un examen físico completo y la aplicación del NIH Stroke Scale, herramienta que permite medir la severidad del evento.
A partir de ese momento, cada minuto cuenta.
“Una vez eso es identificado, se movilizan todos los recursos necesarios: técnicos de CT, radiólogos y el personal de enfermería, para que el paciente reciba el medicamento dentro de la ventana terapéutica indicada”, explicó el Dr. Gutiérrez.
El primer criterio es descartar sangrado intracraneal mediante tomografía. Luego, el tiempo transcurrido desde el inicio de los síntomas determina la elegibilidad:
Trombolisis (terapia fibrinolítica): “Un paciente dentro de las 4 horas y media desde que comienzan sus síntomas pudiera ser candidato para trombolisis”, dijo.
Trombectomía mecánica: Tradicionalmente hasta 6 horas, pero con evidencia reciente que amplía la ventana hasta 24 horas, siempre que estudios avanzados como CT angiografía o diffusion imaging confirmen obstrucción de un vaso grande.
El Dr. Gutiérrez reconoció que Puerto Rico vive un momento histórico en la atención del stroke, tras la certificación de nuevos centros especializados:
Hospital Menonita de Caguas – Centro Comprensivo de Stroke
Hospital Menonita de Ponce – Centro Primario de Stroke
Hospital Auxilio Mutuo San Pablo, Bayamón – Centro Primario de Stroke
Más allá de las certificaciones, explicó que la incorporación de herramientas de inteligencia artificial que permiten a radiólogos y cirujanos endovasculares identificar con mayor precisión el tejido afectado y el tipo de intervención indicada.
“Ciertamente hay herramientas que ya utilizan inteligencia artificial… que ayudan a identificar de manera más rápida las áreas del cerebro afectadas y qué terapia necesita el paciente”, afirmó.
“Alrededor de 3% de los pacientes recibiendo trombolisis pueden sangrar. Esto no debería ser un disuasivo para que el paciente reciba la terapia adecuada”, señaló.
Asimismo, insistió en que los mayores problemas médico-legales se relacionan con no administrar el tratamiento a tiempo, más que con las complicaciones del medicamento.
También señaló que es fundamental que el equipo médico conozca si el paciente usa anticoagulantes, así como realizar una tomografía inmediata para descartar hemorragia.
La capacidad de respuesta depende en gran medida de contar con especialistas e infraestructura en el lugar correcto.
“Tiene un rol protagónico”, afirmó el Dr. Gutiérrez, quien reconoció el desafío particular del país: alta densidad poblacional en la zona metropolitana y distribución desigual de recursos especializados en la isla.