Puerto Rico cuenta actualmente con tan solo 135 endocrinólogos, aún cuando la incidencia de las enfermedades tiroideas es del 20% en la isla.
Antes de ser diagnosticados con la enfermedad de la tiroides, los pacientes pueden llegar a manifestar una serie de síntomas que, por lo general, son similares a otras patologías. Desafortunadamente, este tipo de confusiones, en muchas ocasiones, ha sido motivo de un diagnóstico y tratamiento tardío.
De hecho, en entrevista exclusiva para la Revista de Medicina y Salud Pública, la Dra. Marielba Agosto, quien es endocrinóloga, aseguró que “la mayoría de los pacientes tiene síntomas que no son específicos, lo que causa que se dirijan a consultar con médicos primarios, psicólogos entre otros”.
Es por ello, que para poder disminuir el margen de error en el diagnóstico de esta condición, desde la corporación High Education Health se estará llevando a cabo una capacitación para médicos primarios sobre este tema.
“El propósito que nosotros tenemos con este programa, es lograr que el médico primario tenga el conocimiento suficiente para poder evaluar el inicio de la condición a ese paciente, a través de las diferentes alternativas de exámenes existentes”, explicó la Dra. Agosto.
Lo cierto, es que las enfermedades de la tiroides tienen una alta incidencia en la población, no solo en Puerto Rico, sino en todo el mundo. Así lo hizo saber la Dra. Leticia Hernández, endocrinóloga y actual presidenta de SPED: “Se estima que la prevalencia de todas las condiciones de tiroides en la isla es de un 20%, y en el caso del cáncer de tiroides, se estaría diagnosticando en 40 de cada 100.000 habitantes".
Asimismo, se dice que la incidencia del hipotiroidismo clínico oscila entre el 1% al 2% a nivel mundial, mientras que el hipotiroidismo subclínico se encuentra entre 4% y 10%, y aún así, se dice que estos porcentajes podrían estar en aumento.
Esta capacitación, que se llevará a cabo desde el próximo 19 de marzo, respondería a la baja cuantía de endocrinólogos en la isla. Y al ser condiciones tan prevalentes, las expertas resaltan la importancia de poder hacer una correcta evaluación inicial para discernir si el paciente tiene una condición de tiroides, o no.
“Tenemos pacientes que, probablemente, estén dentro de estas estadísticas, pero que no tienen diagnóstico real. Es decir, que pueden ser diagnosticados y pueden iniciar un tratamiento, pero no necesariamente padecen la enfermedad”, aseveró la Dra. Agosto.
Por ello, la especialista invita a participar al personal médico primario a participar de estos seminarios para que no sea necesario “incurrir en tratamientos, costos, sobrediagnósticos y mucho menos en la carga emocional del paciente al saberse enfermo”.
Por su parte, la Dra. Hernández concluyó mencionando que “hay 135 endocrinólogos ejerciendo, y cada año se gradúan 6 especialistas aproximadamente, sin embargo, siguen sin ser suficientes”.
Vea la entrevista completa: