La especialista destaca la responsabilidad de padres y cuidadores frente al diagnóstico oportuno.
La diabetes afecta a uno de cada 500 niños en Estados Unidos, incluso, la Asociación Americana de Diabetes advierte que la comunidad latina tiene 50% más probabilidades de desarrollar diabetes a comparación de los blancos no hispanos.
Por esa razón, la Dra. Sheila Pérez Colón, endocrinóloga pediátrica, destaca la importancia del diagnóstico temprano, ya que los niños y adolescentes se exponen a un riesgo conocido como la diabetes cetoacidosis, la cual se define como niveles muy altos en niños y que una vez que ha avanzado tanto, la insulina se debe administrar por la vena.
Es importante destacar que los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) indican que la cetoacidosis diabética es más frecuente en las personas que tienen diabetes tipo 1, no obstante, las personas que tienen diabetes tipo 2 también la pueden presentar.
Esta condición aparece cuando el cuerpo no tiene suficiente insulina para permitir que el azúcar en la sangre ingrese a las células para usarlo como energía. En su lugar, el hígado descompone grasa para obtener energía, un proceso que produce ácidos llamados cetonas. Cuando demasiadas cetonas se producen excesivamente rápido, pueden acumularse hasta llegar a niveles peligrosos en el cuerpo.
La Dra. Pérez Colón, destaca que los padres y cuidadores deben estar atentos a los siguientes síntomas:
*Orina mucho
*Aumento del consumo de agua
*Cansancio
*Pérdida de peso
*Deshidratación
Agregó que los niños con la confirmación de este diagnóstico deben ir a la UCI, ya que pueden tener complicaciones serias, entre las que se destaca el edema cerebral.
Vea el programa completo: