Actualmente el Dr. Fernando Joglar, cirujano vascular, es el único especialista en atender casos de trauma es esta vital arteria en la isla
Un estudio retrospectivo entre el periodo entre los años 2011 al 2020 demostraron la efectividad de una técnica vascular mínimamente invasiva en pacientes con traumas recibidos en la arteria de la aorta.
La aorta es la arteria principal que transporta la sangre desde el corazón hacia el resto del cuerpo. Sin embargo, la sangre sale del corazón a través de la válvula aórtica.
Los datos de este estudio fueron revelados a Medicina y Salud Pública (MSP) por el Dr. Fernando Joglar, cirujano vascular y catedrático del Recinto de Ciencias Médicas (RCM). El estudio incluyó datos del registro del Hospital de Trauma del Centro Médico para validar en todos los pacientes.
Los traumas pueden ser aquellos de origen penetrante o tipo romo, cuando es un accidente de vehículo con motor, caídas, entre otros.
El especialista explicó que en caso de un impacto traumático a la aorta, antes se realizaba una toracotomía -tipo de cirugía para abrir la pared torácica-, no obstante, aquellos que no toleren este tipo de intervención pueden beneficiarse de una reparación endovascular, comparada con un procedimiento de cateterismo.
“En la reparación endovascular se ingresa por la arteria femoral un tubo junto con una maya para que la sangre pase por ahí. Este procedimiento no obstruye de paso el flujo de sangre ”, aclara el doctor.
“Fueron más de 13 mil intervenciones de trauma realizadas durante este periodo. De esta cantidad, a 72 pacientes se le realizaron una intervención de la aorta, de estos 72, 68 tenían trauma de romo y hubo cuatro de traumas penetrante, estos 68 presentaron trauma romo en la zona torácica y uno de la aorta abdominal”, explicó el también subdirector del Hospital de Trauma desde entre el 2004 hasta el 2008.
“La cirugía abierta tenía varios riesgos, una mortalidad mucho más alta de un 23% y un riesgo de paraplejia, ya que al realizar este procedimiento, se reducía el flujo de sangre en la médula espinal y había personas jóvenes que eran intervenidas de esa manera y por supuesto al cabo de un tiempo no podían mover sus miembros inferiores”, relató el doctor.
“De los 4 penetrantes, 2 eran de la aorta torácica y otra de la abdominal”, indicó el doctor, añadiendo que hasta marzo de 2021, ha tenido que intervenir unos cuatro casos de traumas en la arteria aorta en Puerto Rico, siendo el único en su clase que realiza este tipo de procedimiento.
El especialista recalcó que los traumas a la aorta se deben detectar a tiempo pues se trata de un escenario vital para la vida del paciente y se debe conocer para qué tipo de procedimiento este es candidato, pues las comorbilidades que puedan tener juegan un papel importante a la hora de intervenirlo quirúrgicamente.
El Dr. Joglar confirmó que los datos de este estudio demuestran una ventaja de las técnicas empleadas en la Isla versus aquellas de Estados Unidos, pues el riesgo de mortalidad en Puerto Rico de la técnica de reparación de la aorta a nivel endovascular es de solo 4%, versus un 7.2% en territorio estadounidense, según datos de estudios publicados, indicó.
“Tenemos unos datos publicados en términos de mortalidad. El 89.8% fueron hombres jóvenes con una edad media de 37 años. El 94% recibió trauma romo. Con estos datos probamos que este tipo de intervención se puede hacer en Puerto Rico con buenos resultados”. enfatizó.
Otro dato importante del estudio fue que de los datos se desprenden es que predominaba el arco bovino en la anatomía de estos pacientes intervenidos. Se trata de cuando la arteria carótida común izquierda tiene un tronco común con la arteria innominada.
“Vimos que 34% de nuestros pacientes estudiados tienen arco bovino y esto es más alto de lo que esperaríamos porque lo que se describe en literatura es que se describe entre un 10 a 15% de los casos. Este tipo de pacientes está predispuesto a padecer de aneurismas” describió, añadiendo que estaría ampliando su investigación buscando el por qué el puertorriqueño tiene este tipo de arco anatómico que pudiera predisponer a condiciones serias como las aneurismas.