Hidropesía fetal es el nombre que recibe la acumulación anormal de líquidos en el cuerpo del feto.
Hidropesía fetal es el nombre que recibe la acumulación anormal de líquidos en el cuerpo del feto. Se divide en dos tipos: inmune y no inmune.
La hidropesía inmune puede desarrollarse cuando hay incompatibilidad de Rh, es decir, si la madre es Rh negativa y el bebé positiva, el sistema inmunitario de la madre puede atacar los glóbulos rojos del feto, causando anemia y fallos en el correcto funcionamiento del corazón. Son muy pocos casos los que se registran con este tipo de hidropesía.
Por otro lado, la hidropesía no inmune es más común. Ocurre cuando hay una afectación de la capacidad del cuerpo para manejar los líquidos. Se han reconocido tres causas frecuentes para esta afección: problemas cardíacos o pulmonares, anemia grave y problemas genéticos.
Síntomas en la mujer embarazada y en el bebé
Las mujeres embarazadas pueden presentar los siguientes síntomas:
Después del nacimiento, el bebé puede presentar los siguientes síntomas:
Para diagnosticar objetivamente la hidropesía fetal, es necesario que se realicen pruebas y análisis como ecografías, para comprobar el buen funcionamiento de los órganos del bebé; muestras de sangre fetal y amniocentesis.
Tratamiento para la hidropesía durante el embarazo y para recién nacidos
El tratamiento de la hidropesía se define con base en la causa; durante el embarazo se puede tratar solo en algunos casos, y este procedimiento puede incluir medicamentos que induzcan el nacimiento prematuro y la transfusión sanguínea fetal intrauterina.
Por su parte, el tratamiento para recién nacidos puede abarcar desde la transfusión directa de glóbulos rojos compatibles con la sangre del bebé, hasta la extracción de el líquido adicional de los pulmones y los órganos afectados. Si hay deficiencias cardíacas y/o pulmonares, puede incluirse medicamentos que ayuden a corregir y controlar estas afecciones.
Como método de prevención, algunos especialistas pueden recetar un medicamento con el objetivo de evitar la incompatibilidad de Rh cuya administración se recomienda durante y después del embarazo, de esta manera se reducen los riesgos de cualquier complicación que se pueda presentar.