Los niños que inician su actividad lectora a temprana edad adquiere una comprensión de lectura superior y un vocabulario rico en palabras, herramientas fundamentales que aplicaría a lo largo de su vida.
La psicóloga María Ángeles Naranjo Moreno, miembro del servicio de pediatría del hospital Quirónsalud Huelva-IHP, ha remarcado la lectura en edades tempranas ayuda a los más pequeños a trabajar la empatía, potenciar las habilidades sociales y psicolingüísticas, y refuerza el vínculo con sus padres.
En palabras de la especialista, «en todas las etapas de la vida un buen libro nos va a ofrecer un mundo de posibilidades para crecer como persona». La lectura es una actividad que aporta numerosos beneficios en el desarrollo tanto en niños como en adolescentes y adultos mejorando la lectura comprensiva, la redacción y la atención auditiva. Y es «una ayuda indiscutible para que los más pequeños comentan menos faltas de ortografía», ha explicado la experta, según han informado desde el centro hospitalario en una nota de prensa.
A su juicio, «es muy importante fomentar el amor por la lectura incluso antes de que los niños aprendan a leer». Según relata la psicóloga «una manera ideal de hacerlo es dedicando unos minutos a leer un cuento con nuestros hijos, lejos de las nuevas tecnologías que son tan interesantes y motivadoras para ellos».
MªJosé Gil, pediatra del hospital Quirónsalud Huelva, también insiste en dejar a un lado las pantallas para disfrutar de tiempo de calidad con nuestros hijos «a la vez que les brindamos un mejor desarrollo de las áreas de su cerebro vinculadas a la regulación y el autocontrol». «Sifinalmente optamos por el uso de dispositivos electrónicos para los más pequeños este siempre debe estar regulado y acompañado por un adulto», ha proseguido.
Por su parte, María de los Ángeles Naranjo ha apostillado que «también es importante elegir libros de una temática que lesapasione y sean acordes a su nivel de desarrollo». «Esta actividad debe ser un refuerzo positivo, que lo vean como el premio del día y no como una obligación».
Como ha sostenido, «debe ser un momento para disfrutar de la compañía de sus padres y, sobre todo, de la atención de estos». Además de lo descrito, la psicóloga insiste en hacer de la lectura una actividad familiar que ayudará a disfrutar juntos y a consolidar la lectura como un hábito: acudir a la librería en busca de nuevos títulos elegidos entre todos, comentar juntos la historia del libro, visitar ferias del libro y cuentacuentos. «De esta manera conseguiremos despertar la pasión por la lectura en los más pequeños», ha concluido.