Normalmente, los efectos psicológicos de la tartamudez pueden ser severos afectando el estado de ánimo de la persona. Además, puede llegar a ser causa de un importante aislamiento social.
Cuando los niños recién empiezan a hablar lo hacen de manera errática y entrecortada, completamente normal mientras comprenden la correcta pronunciación de todas las consonantes del abecedario, y organizan las ideas antes de expresar con palabras todo lo que piensan.
Cuando la repetición de palabras, sílabas o sonidos se vuelve muy frecuente, y no parece mejorar, el niño ve gran dificultad para poder comunicarse con las demás personas, y ya podría tratarse de un trastorno del lenguaje de mayor atención como la tartamudez.
Tipos de tartamudez
Es más probable que un niño sufra de tartamudez, cuando en su familia hay antecedentes familiares de este trastorno, presenta dificultades del habla por más de 6 meses o tiene otros desórdenes asociados a las habilidades de comunicación. Estudios han demostrado que esta dificultad es más común en niños que en niñas.
Apoyar al niño en casa
Debes saber que la tartamudez no tiene cura, pero sí existen tratamientos que permiten aliviar los síntomas dependiendo de cuáles sean estos, la edad del niño, y su salud en general. Iniciar estas alternativas de manera inmediata, puede evitar que el trastorno acompañe al pequeño hasta la vida adulta.