Especialistas del Hospital Damas desmitifican la menopausia y destacan la importancia de buscar ayuda profesional durante esta etapa de vida.
En un seminario informativo celebrado en el Hospital Damas, la doctora Gladysmaria Figueroa, ginecóloga certificada en menopausia, y la doctora Bárbara Barros, psicóloga clínica, abordaron las implicaciones físicas y psicológicas de la menopausia, una etapa que afecta a millones de mujeres pero que aún permanece envuelta en desinformación y estigmas sociales.
El encuentro, cubierto en exclusiva por la revista Medicina y Salud Pública, marcó el inicio de una serie de conversaciones que se extenderán durante octubre, con el objetivo de empoderar a las mujeres y brindarles herramientas para transitar esta fase de manera informada y saludable.
La doctora Figueroa, quien además compartió su experiencia personal como mujer menopáusica, definió la menopausia como "una aventura hormonal, como una adolescencia".
"Es una transición natural, no es una enfermedad. La gente piensa que es una enfermedad, no es una enfermedad, es una transición y hay que verlo como un paso. Una transición, algo mejor", enfatizó la especialista.
La menopausia se diagnostica oficialmente cuando han transcurrido 12 meses sin menstruación, y ocurre generalmente entre los 45 y 55 años. Sin embargo, la doctora Figueroa advirtió que la perimenopausia, el período de transición, "puede empezar hasta 10 años antes".
"Usted, si usted empieza a tener cambios y usted dice, 'No, que estoy muy joven.' No, porque ese periodo de transición empieza desde antes y empieza con cosas mínimas que a veces nosotros no podemos detectar", explicó.
Aunque los sofocones o "calentones" son el síntoma más reconocido, las especialistas detallaron una amplia gama de manifestaciones que incluyen:
Sudores nocturnos y problemas de sueño
Cambios de humor y llanto fácil
Pérdida de memoria ("se nos pierden las cosas")
Dolores articulares y corporales
Resequedad vaginal, oral y ocular
Disminución del deseo sexual
Cambios en la piel y el cabello
Dolor de cabeza
La doctora Figueroa compartió su propia experiencia: "Yo empecé hace más de 10 años con diferentes síntomas que me llevaron a ser evaluada por diferentes médicos... se me olvidaban las cosas, dolores en el cuerpo, dolores articulaciones, depresión, cambio de estado del ánimo".
Uno de los temas más importantes que abordó la ginecóloga fue el síndrome genitourinario de la menopausia, caracterizado por resequedad vaginal.
"No solamente se le seca la boca, se le secan los ojos, sino que el área vaginal, esa mucosa es bien sensitiva a la hormona femenina, al estrógeno y se seca el área", explicó la doctora Figueroa.
La especialista destacó la importancia de usar lubricantes y humectantes vaginales, sin vergüenza: "Allá abajo hay que ponerse también [humectante]. Váyanse a la sección donde están los condones. Hay condones, vibradores, hay moisturizer, hay lubricantes".
La doctora Bárbara Barros, psicóloga clínica, profundizó en las implicaciones emocionales y de salud mental que acompañan esta transición hormonal.
Citando el trabajo de la neurocientífica Lisa Musconi sobre las "tres P del cerebro femenino" (pubertad, embarazo y perimenopausia), la doctora Barros destacó que estudios recientes demuestran que "en comparación con mujeres blancas americanas, las mujeres negras y las latinas tienden a tener esta etapa de perimenopausia durante más años y los síntomas de forma más adversa".
Las especialistas dedicaron parte de su presentación a desmentir mitos comunes:
Mito 1: "La menopausia llega de golpe" Falso. Es un proceso gradual que puede durar años.
Mito 2: "Hay que aguantar los síntomas, es parte de la vida" "Eso es uno de los elementos más difíciles que tenemos y especialmente nosotras las mujeres porque muchas cosas nos normalizan y nosotras tenemos que aguantar", afirmó la doctora Barros. "Usted no tiene que aguantar todos los síntomas. Si tú te sientes mal, aunque el resto de tu lado no se sienta mal... vaya, hágase la evaluación".
Mito 3: "Después de la menopausia, la vida sexual se acaba" Completamente falso. Existen tratamientos y opciones para mantener una vida sexual plena.
Mito 4: "Ya no soy atractiva" La doctora Barros fue enfática: "La menopausia muchas veces se ve como si fuera una fecha de expiración a la vida placentera... Pero, ¿quién dijo que se acabó ahí?"
Ambas especialistas coincidieron en que durante décadas se normalizó el sufrimiento de las mujeres durante la menopausia.
"La gente decía, 'Ay, eso la menopausia no le daba antes a la gente.' No, señor... Antes la gente no tenía endometriosis. Antes la gente no tenía dolor, la gente no tenía ovarios poliquísticos porque se normalizaba todo", señaló la doctora Figueroa.
"No se fomentaba que las pacientes se quejaran, sino que iban al ginecólogo, se hacían su chequeo y ya no se hablaba de ningún síntoma, que nosotros tenemos la ventaja de hablar ahora", agregó.
Vea programa completo aquí:
La doctora Figueroa enfatizó que cada mujer vive la menopausia de forma diferente y que "el plan de tratamiento debe ser personalizado".
Entre las opciones disponibles mencionó:
Cambios en el estilo de vida (evitar desencadenantes como café, alcohol, comidas picantes)
Técnicas de respiración
Humectantes y lubricantes vaginales
Estrógeno vaginal
Terapia cognitiva conductual
Tratamientos hormonales
Fármacos específicos (antidepresivos, clonidina, oxibutinina)
"La menopausia es solo el comienzo de una etapa hermosa. Busque ayuda y apoyo", concluyó la doctora Figueroa.
Por su parte, la doctora Barros recordó que "fortaleza no es sinónimo de todo lo que tú aguantas sin quejarte, sin buscar ayuda, eso es una falacia. Al contrario, cuando uno es fuerte es el saber buscar esos recursos y cómo buscar ayuda".
El seminario continuará los próximos jueves de octubre, con la participación de especialistas en sexología y otras áreas relacionadas con el bienestar integral de las mujeres durante la menopausia.