Un día cualquiera Jackeline Colón López, una estilista puertorriqueña, durante su jornada laboral sintió mucha inflamación en algunas partes de su cuerpo como las rodillas, los tobillos y los hombros. Nunca sospecho que se trataba de artritis.
Lorena Ramírez
Agencia Latina de Noticias Medicina y Salud Pública
Un día cualquiera Jackeline Colón López, una estilista puertorriqueña, durante su jornada laboral sintió mucha inflamación en algunas partes de su cuerpo como las rodillas, los tobillos y los hombros. Nunca sospechó que se trataba de artritis.
De hecho, le adjudicó dicha inflamación a los químicos que utilizaba en el salón de belleza o por estar tantas horas de pie y moviendo los brazos.
Al pasar los días la inflamación de Jackeline no cedía, por lo que decidió visitar al médico. No obstante, a pesar de que le hicieron una serie de exámenes de laboratorio los médicos no pudieron diagnosticar qué enfermedad padecía.
Al no recibir un tratamiento a tiempo, Jackeline lamentablemente terminó en una silla de ruedas y duró con ella aproximadamente un año, pues la inflamación era tanta que ya ni siquiera podía caminar.
Fue entonces dónde conoció a la doctora Amarilis Pérez de Jesús, quién a partir de una serie de estudios especializados pudo diagnosticar la artritis reumatoidea que Jackeline padecía. Este hallazgo se logró a partir de una muestra de líquido que se extrajo de la rodilla de la mujer.
“Jackeline llegó aquí en silla de ruedas, tenía un proceso inflamatorio severo en las rodillas, los tobillos y los hombros”,
cuenta la reumatóloga de Jackeline, Amarilis Pérez.
A partir del diagnóstico de la doctora de Jesús, Jackeline recibió un tratamiento bastante agudo y contundente por lo avanzada que estaba su artritis, dando como resultado a las tres semanas una mejoría considerable.
“Ya a las tres semanas yo estaba bastante estable, empecé a comer bien, y seguí progresando; cada vez que aparece un medicamento nuevo ella me atiende con ese tratamiento y voy mejorando cada vez más”,
cuenta Jackeline.
Sin embargo, a causa del tiempo que Jackeline duró sin ser tratada tuvo que realizarse dos reemplazos de cadera y uno de rodilla, no obstante después de ello su salud ha estado bastante estable.
“Después de que la doctora Amarilis Pérez de Jesús me siguió atendiendo he estado bien. No he tenido que hacerme más reemplazos y me siento muy feliz, ahora puedo hacer lo que hacía antes y realmente no siento limitación alguna”,
relata Jackeline Colón, paciente con artritis reumatoidea.
Jackeline manifiesta cuan importante que es para su condición poder contar con un reumatólogo como la doctora Amarilis de Jesús. Que es su rematóloga hace más de 20 años.
Cada vez que siente una mínima molestia sabe que puede acudir donde su especialista y esta le ayudará con su condición.
La mujer además resalta lo mucho que significa para ella que la doctora Amarilis la eduque frente a su condición.
Porque le enseña lo que tiene que hacer, los horarios de los medicamentos, cómo debe comer los consejos e instrucciones para que el tratamiento sea efectivo, etc.
“Con ella comenzamos primero ha identificar la condición lo cual inicialmente fue fácil porque ella traía un cuadro clínico completo; y luego de que identificamos la condición comenzamos el tratamiento",
relata la doctora Amarilis de Jesús,
"En este caso en particular utilizamos corticosteroides de primera línea para tratar la inflamación. También se le inyectaron las articulaciones y luego comenzamos los tratamientos con los agentes modificadores de la enfermedad y posteriormente añadimos agentes modificadores biológicos”,
explica la doctora Amarilis.
Hoy en día a pesar de los reemplazos articulares a los que tuvo que someterse Jackeline y las grandes afectaciones que le causó la enfermedad tiene una calidad de vida bastante activa y funcional.
Auspiciado por Artritis Reumatoide.