La enfermedad de Crohn hace parte de las Enfermedades Inflamatorias del Intestino (EII), un grupo de enfermedades crónicas que afectan al intestino.
Susana María Rico
Agencia Latina de Noticias de Medicina y Salud Pública
La enfermedad de Crohn hace parte de las Enfermedades Inflamatorias del Intestino (EII), un grupo de enfermedades crónicas que afectan al intestino. Durante el reciente evento ‘Digestive Disease of the Caribbean 2019’ organizado por la Asociación Puertorriqueña de Gastroenterología, este tema fue uno de los más debatidos entre los profesionales asistentes, entre ellos la Dra. Irene Villamil, quien concedió una entrevista a la revista MSP.
El aspecto fundamental que abordó la doctora fue la sintomatología de los pacientes, en su mayoría adultos jóvenes y cercanos a la tercera edad, con Crohn, pues muchas veces los síntomas son confundidos con los que pueden manifestarse en otras enfermedades gastrointestinales. “Sabemos que la enfermedad de Crohn es un tipo de EII. Esta es una condición inflamatoria intestinal que puede ocurrir desde la boca hasta el ano. Cabe destacar que esta condición, para que se manifieste, tiene que tener una serie de condiciones favorable para ella”, explicó la gastroenteróloga.
Dentro de dichos factores que producen la enfermedad de Crohn se encuentran: herencia genética, ya que el ADN del paciente debe contener el material genético que lo predispone a sufrir la condición, “sin embargo, hay pacientes que pueden tener la condición en el ADN y nunca lo manifiesten”, expresó la doctora Villamil.
Para que se padezca la condición, también deben haber factores favorables en el medio ambiente, “hemos visto que pacientes cuando tienen alguna infección intestinal o toman ciertos antibióticos o antiinflamatorios o hay alguna condición que lo pueda precipitar, van a manifestar la enfermedad de Crohn”, resaltó la doctora en su entrevista.
En total son tres grandes factores: predisposición genética, incidencia del medio ambiente y la activación de la enfermedad en el organismo del paciente como consecuencia de lo anterior. Esto último se produce porque el sistema inmunológico ataca de manera inapropiada al intestino, generando la inflamación en ese órgano. Pero esto no quiere decir que la patología se manifieste de la misma manera en los individuos afectados. “Si este es un paciente que tiene la condición inflamatoria, que se manifiesta en intestino delgado, puede tener mala absorción de los alimentos, pérdida de peso, dolor abdominal, anemia o puede tener úlceras en el sistema intestinal. También puede haber tanta inflamación en esta área -conocida como íleo-abdominal- que puede haber estrecheces, haciendo que la parte superior del intestino se ensanche”, ejemplificó la doctora Villamil en su intervención.
Además destacó que es crucial detectar estos problemas a tiempo, ya que el paciente -en este tipo de casos más serios con enfermedad de Crohn- puede sufrir padecer una perforación intestinal, consecuencia de la EII sumamente peligrosa que puede convertirse en peritonitis, inflamación que incluso llega a causar la muerte en quienes la padecen.
Sin embargo, en caso de padecer una enfermedad leve, con síntomas como pérdida de peso o diarrea, puede llevar una vida totalmente normal si recibe la atención médica adecuada. Si un paciente no recibe el tratamiento más eficaz para su tipo de enfermedad, con el tiempo los síntomas empeorarán y su calidad de vida se verá reducida.
En su entrevista, la especialista recalcó que hoy en día existen numerosos tratamientos como opción alternativa a la cirugía. Pero, su prescripción o aplicación dependen del historial clínico del paciente, la complicación que manifieste, el estilo de vida y la evaluación del médico tratante.
https://www.youtube.com/embed/4bYElz4n_dM