Conocer los hábitos permitiría a los endocrinólogos mejorar la atención a sus pacientes jóvenes.
La doctora Giselle Medina iniciará junto a su equipo de la Ponce Health Science University (PHSU), con el objetivo de investigar los síntomas afectivos y percepción de la adherencia al tratamiento en cuidadores primarios de adolescentes en Puerto Rico.
“Esta investigación tiene el propósito de examinar el impacto emocional y psicosocial en padres y cuidadores de adolescentes con diabetes tipo I en Puerto Rico”, destaca la principal precursora de este estudio.
En la cual pueden participar las personas que cumplan con las siguientes características:
*Ser padre, madre o cuidador primario de un adolescente entre los 11 y 17 años.
*El paciente debe tener un diagnóstico certificado por un médico de diabetes tipo I
*Residir en Puerto Rico
Diabetes en Puerto Rico
En estadísticas presentadas por expertos en la Revista de Medicina y Salud Pública, refieren que de acuerdo con nuevas investigaciones, la diabetes en niños ha aumentado un 3,9% en los últimos años, sobre todo en países industrializados del mundo.
Sobre esto, la Dra. Myriam Allende, endocrinóloga, indicó que aunque a la fecha no se ha establecido la verdadera causa de la alta prevalencia, los especialistas indican que el sobrepeso y los hábitos alimenticios influyen en la población en general, incluidos los niños y jóvenes.
Es por esa razón que la destacada endocrinóloga enfatiza en la necesidad de hacer más pedagogía en los colegios, “para reducir la diabetes se debe prestar más atención a los niños cuando se encuentran en el colegio, ya que allí pasan gran parte del día”.
Los niños son más propensos a desarrollar problemas de diabetes, sobre todo cuando se encuentran en etapa de crecimiento, debido a que hay mayor probabilidad de desarrollar la hipoglucemia y la hiperglucemia, dos condiciones causadas por desniveles de azúcar en el organismo.
Según la Dra. Allende, es importante fomentar la creación de espacios para realizar actividad física y cuidar que los alimentos proporcionados a los menores sean bajos en contenido calórico y de esta manera evitar la obesidad y el desarrollo de la diabetes en la población infantil.