Oftalmólogos y reumatólogos explican como la manifestación podría constituir la sospecha de una enfermedad ocular o reumática.
Desde el punto de vista de los pacientes y tal vez la medicina primaria quizás el síndrome de ojo seco pudiera parecer una manifestación sencilla y hasta podría pasar desapercibida.
Sin embargo, subespecialistas en la oftalmología y la reumatología de la isla alertan que el síndrome de ojo seco es una manifestación que se agudiza según el cambio hormonal de las mujeres embarazadas o más bien, pudiera ser una señal de condiciones tan serias como el Lupus, Síndrome de Sjogrens y Artritis Reumatoides (AR).
La manera en cómo afecta este síndrome por ejemplo, a las mujeres embarazadas, fue descrita en un reciente estudio publicado por las doctoras Kathleen Guerrero y Astrid González, del Departamento de Oftalmología de la Escuela de Medicina del Recinto de Ciencias Médicas (RCM).
“Estudios epidemiológicos han mostrado una prevalencia más alta de ojo seco en mujeres. La prevalencia de este síndrome aumenta con la edad, afectando aproximadamente a 10% de las personas entre 30-60 años y 15% de las personas sobre 65 años, según artículos publicados por la Academia Americana de Oftalmología”, indicaron.
A pesar de el ojo seco pudiera ser una alerta de sospecha sobre alguna etiología autoinmune en desarrollo, ambas señalaron que los cambios hormonales tanto en mujeres premenopáusicas y embarazadas ocasiona que aumente “la queja de ojo seco”.
“ Los síntomas que presentaron estas mujeres incluían picazón, ojo rojo y sensación de quemazón. El impacto de ojo seco en las mujeres podría interferir significativamente en la calidad de vida al no ser debidamente identificada y tratada. Esto podría traer complicaciones detrimentales de superficie ocular crónica secundarias al ojo seco tales como keratitis filamentosa, úlceras corneales, perforación y llegar en casos muy severos a la ceguera”, afirmaron ambas doctoras.
Sospecha de una enfermedad inflamatoria
Dr. Luis Vilá, director de la Unidad de Reumatología del Recinto de Ciencias Médicas. Suministrada.
El síndrome de ojo seco no solo afecta la calidad de vida de las mujeres. Más bien, podría ser una señal de la existencia de una condición inflamatoria en desarrollo, según reiteró a la Revista Puertorriqueña de Medicina y Salud Pública (MSP) el Dr. Luis Vilá, director de la Unidad de Reumatología del Recinto de Ciencias Médicas (RCM).
“El ojo seco puede ser un síntoma de una enfermedad autoinmune, como por ejemplo, el síndrome de Sjogren's, que también envuelve boca seca y afecta varios órganos y tejidos. Algo que hay que mencionar es que muchos de estos pacientes no comunican que tienen el ojo seco. Ellos pueden sentir como un cuerpo extraño dentro del ojo o sentir una arenilla o sensación de quemazón e inclusive fotofobia. En algunos casos hay dolor”, explicó en un principio.
Cabe destacar que el Dr. Vilá, reumatólogo, funge como investigador del primer estudio en Puerto Rico que ha logrado diagnosticar a más de 100 pacientes con síndrome de Sjogren's en la isla, en conjunto con la Dra. Irma Vázquez.
“Una de las condiciones reumatológicas que más se asocia al ojo seco es el Síndrome de Sjogren's, pero no podemos olvidar los pacientes de Artritis Reumatoides y los pacientes de Lupus. Un 20% de los pacientes con Artritis Reumatoides pueden tener el Síndrome de Sjogren's secundario (a causa de una enfermedad primaria) y que estas manifestaciones de ojos secos, boca seca, pueden ocurrir inclusive al inicio de las manifestaciones de la Artritis Reumatoides o Lupus”, formuló.
Vilá añadió que la enfermedad de sarcoidosis (que produce una inflamación en pulmones, hígados, piel, tejidos y ganglios linfáticos) es otra afección que podría ocasionar el síndrome del ojo seco.
“Personas que toman ciertos medicamentos, como los antihistamínicos, ciertos diuréticos, pueden ocasionar ojo seco, también algunos antidepresivos pueden ocasionar ojo seco y esto hay que considerarlo a la hora de evaluar al paciente”, esbozó.
Asimismo, el Dr. Vilá resaltó la labor de los oftalmólogos de la isla para tratar el síndrome de ojo seco, pues son los especialistas que podrían evitar que el paciente sufra daños en la córnea y a la vez, podrían detectar a tiempo síntomas que levanten sospecha de la existencia de una condición autoinmune.
“A los médicos primarios les recomiendo tomar en cuenta estos síntomas, explorarlos y hacer un historial completo. Debe estar alerta. Puede que tenga el síntoma a causa de un medicamento, o descontrol de alguna enfermedad, pero que siempre que tenga la sospecha lo refiera al reumatólogo”, concluyó.