El mundo vuelve a tener esperanza en la lucha contra el virus del VIH y se confirma la cura mediante trasplante de células madre.
Recientemente se dio a conocer el llamado 'paciente de Düsseldorf', un hombre de 53 años, que se convirtió en el tercer caso que se ha registrado, que se ha curado completamente del VIH mediante un trasplante de células madre. Como en el caso de los otros dos pacientes (Paciente de Berlín y Paciente de Londres), el trasplante se realizó para tratar una enfermedad hematológica aguda, que se había desarrollado además de la infección por VIH.
Después de casi 10 años del trasplante de células madre procedentes de un donante no emparentado y más de 4 años después de finalizar la terapia contra el VIH, el 'paciente de Düsseldorf' goza de buena salud, según el reporte oficial de los investigadores del Instituto de Investigacio´n del Sida IrsiCaixa y el University Medical Center de Utrecht (Pai´ses Bajos)
Javier Marti´nez-Picado, investigador ICREA en IrsiCaixa, co-director de IciStem,, asegura que: «Desde hace 9 an~os estamos estudiando estos casos excepcionales en los que, gracias a una estrategia terape´utica, el virus queda totalmente eliminado del cuerpo. Queremos entender detalladamente cada paso del proceso de curacio´n para poder disen~ar estrategias que sean replicables a toda la población».
Este caso se suma a los de Timothy Brown, conocido como «el paciente Berlín», fallecido en septiembre de 2020 a causa de un cáncer. Después le siguieron el paciente de Londres, Adam Castillejo, y ahora Dusseldorf, quien de momento prefiere mantenerse en el anonimato.
El delicado tratamiento del trasplante de células madre
María Salgado, investigadora IGTP en IrsiCaixa y coautora del estudio, asegura que el tratamiento tiene una serie de riesgos altos para el paciente, por tal motivo el trasplante de células madre sólo se realiza en el marco del tratamiento de otras enfermedades potencialmente mortales.
Revela la investigadora que en 2008, el paciente fue diagnosticado de VIH. Tras el diagnóstico, inicio´ el tratamiento antirretroviral, que le permitió controlar la infección y reducir la cantidad de virus hasta niveles indetectables en la sangre. Seis meses después de iniciar su terapia contra el VIH, le diagnosticaron leucemia mieloide aguda (LMA), un tipo de cáncer de la sangre potencialmente mortal.
En 2013 se sometió a un trasplante de células madre por esta enfermedad. «Desde el principio, el objetivo era tratar tanto la leucemia como el VIH», explica el hematólogo Guido Kobbe, quien realizó el trasplante en Düsseldorf.
Mutación específica del donante
Explica Salgado que las células madre extraídas del donante presentaban una mutación específica en el gen CCR5 (mutación CCR5Delta32). Esta rara mutación genética, que predomina en Europa central y septentrional, provoca la ausencia de un sitio de acoplamiento para el VIH en las células inmunitarias, lo que proporciona una buena protección contra la infección por el virus. El trasplante de células madre trató así ambas enfermedades. Esta alteración genética hace que no se produzca una de las puertas de entrada del VIH en las células y, por tanto, dificulta la infección.
«Que coincidan todos estos factores es muy complicado, solo un 1% de la población tiene esta mutación y, además, es necesario que sea un donante compatible a nivel sanguíneo para evitar el rechazo del trasplante», detalla Salgado.
En 2018 se puso fin a la terapia contra el VIH, que había garantizado el control de cualquier resto de VIH hasta ese momento. Para garantizar que en última instancia se pudiera hablar de curación, durante todo este periodo se llevaron a cabo pruebas exhaustivas, por ejemplo, para determinar si aún podían encontrarse indicios de signos de virus del VIH con capacidad de replicación.
El paciente de Dusseldorf, un caso de esperanza
Los resultados de la investigación fueron publicados en la revista «Nature Medicine», en donde los autores describen qué indicadores adicionales revisaron para poder excluir cualquier resto de infección activa por el VIH y, por tanto, dar ahora por hecha la curación tras el trasplante de células madre.
«Podemos confirmar que es posible prevenir la replicación del VIH de forma sostenible combinando dos métodos clave. Por un lado, tenemos el agotamiento extensivo del reservorio del virus en células inmunitarias longevas y, por otro, la transferencia de la resistencia al VIH del sistema inmunitario del donante al receptor, lo que garantiza que el virus no tenga ninguna posibilidad de propagarse de nuevo», sostuvo Björn Jensen, del Hospital Universitario de Düsseldorf.
La revelación de este caso de éxito, permite a la comunidad médica que investiga cómo contrarrestar y curar el virus, tener esperanza, y en especial después que se diera a conocer que el estudio de Janssen había fallado en su fase tres.
El Caso Berlín - Timothy Brown
Se conoce que Brown estuvo más de 12 años sin rastro del VIH, según los especialistas que lo trataron. Ahora, los detalles de aquel estudio fueron presentados en la Conferencia sobre Retrovirus y Enfermedades Oportunistas (CROI), la data reveló que este paciente, casi 10 años después del trasplante de células madre procedentes de un donante no emparentado y más de 4 años después de finalizar la terapia contra el VIH, estaba libre del virus. Salgado afirma que «no tiene anticuerpos anti VIH; es decir, es como si nunca hubiera estado infectado con el VIH».
Según la investigadora, el hecho de que el virus no haya reaparecido es el resultado de una preparación y un seguimiento científico y terapéutico extremadamente minuciosos. Hasta la fecha, se trata del seguimiento diagnóstico más largo y preciso de un paciente con VIH tras un trasplante de células madre.
El caso Londres - Adam Castillejo
El caso de Adam Castillejo es el segundo registrado hasta el momento. En 2003 le diagnosticaron VIH y en 2012, fue diagnosticado de un linfoma de Hodgkin muy agresivo, lo que casi era una sentencia de muerte. Tras un primer fracaso del primer trasplante para tratar su linfoma, en 2015 le dieron la opción de un trasplante de médula de un donante con una rara mutación, CCR5 Delta32, que impide la entrada la entrada del virus en las células diana, con lo que podía curarse de ambas enfermedades.
El hombre de origen venezolano, vive en Londres y se ha convertido en la segunda persona en el mundo en curarse del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). En 2020 se informó que se había logrado con éxito eliminar el VIH -el virus que causa el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida)- en este paciente.
De momento, se sabe que Castillejo, todavía está libre del virus después de suspender la terapia antirretroviral, lo que confirma el éxito del tratamiento.
Continúan los esfuerzos y estudios
Con la confirmación de este caso, se abre un telón de posibilidades y Salgado asegura que siguen los estudios, tal como es el caso de otros dos pacientes a los que se les ha llamado ´el paciente de Nueva York´ y el del Hospital City of Hope.
Advierte Salgado que «ninguno de ellos tiene unas características inmunitarias especiales que les permitan controlar la infección por el VIH de forma espontánea, sino que el virus se ha eliminado del cuerpo como resultado de una intervención médica. Esto diferencia estos casos de erradicación de los de curacio´n funcional en controladores de élite o post-tratamiento conseguidos hasta ahora, en los que el propio cuerpo de las personas tenía factores especiales que les permitía controlar el virus».
Estrategia agresiva, no escalable
No obstante, advierte la investigadora, esta estrategia es muy agresiva y no es escalable al resto de la población. El trasplante de células madre solo se emplea para personas que sufren una enfermedad hematológica y no tienen alternativa terape´utica. Claro está, en el caso de las personas con VIH, si´ existe una alternativa, y es el tratamiento antirretroviral.
«Una posible estrategia con la que ya se está trabajando es introducir la mutación CCR5?32 mediante terapia génica para conseguir la curacio´n del VIH sin tener que pasar por un trasplante», añade Marti´nez-Picado.
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