Honran la vida de la Dra. Maribel Rodríguez

Médicos se unen para destacar su gesta médica, científica y humanitaria.

Medicina y Salud Pública

    Honran la vida de la Dra. Maribel Rodríguez

    Luchadora, soñadora, médico y con un don humanitario que se destacó por encima de su gran aportación científica en el campo de la investigación y tratamiento contra la Hepatitis C.

    Doctora Maribel Rodríguez, autoridad mundial en Hepatitis C.[/caption]

    Así fue descrita la doctora Maribel Rodríguez, por un nutrido grupo de colegas durante el servicio católico ofrecido en su memoria en la Parroquia San Juan Evangelista en Guaynabo.

    Allí, médicos, investigadores y familiares, se confundían en abrazos y en sus rostros se fusionaban la tristeza y el orgullo por el legado científico de la científica puertorriqueña a nivel mundial.

    Rodríguez falleció sorpresivamente en un viaje a Buthan, ciudad ubicada en Asia, colindante con la India a sus 63 años de edad.  

    Entre los investigadores de primera categoría que estuvieron presentes se destacaba el doctor José Rodríguez Orengo, exrector del Recinto de Ciencias Médicas (RCM) y miembro fundador de la Fundación de Investigación, la doctora Esther Torres, autoridad en avances científicos en la enfermedad de Crohn en Puerto Rico y la doctora Griselle Ortiz, directora médico asociado de la Fundación de Investigación, entre otros.

    "Su misión humanitaria era única", destacó la doctora Griselle Ortiz.[/caption]

    “Fue una mentora que siempre estuvo ahí enseñándonos cosas nuevas y siempre tuvo ese don especial de solucionarle los problemas a los pacientes con Hepatitis C e hígado graso. Ella me enseñó a luchar por las cosas que se podían creer que no se podrían lograr. Ella fue una visionaria de las nuevas terapias de la Hepatitis C”, sostuvo primeramente la doctora Ortiz, notablemente compungida y quien laboró con la doctora Rodríguez desde 2007.    

    “Su misión humanitaria era única”, destacó la internista.

    De otra parte, la doctora Michelle Echeandía, directora de operaciones clínicas e información de la Fundación de Investigación y quien laboró por más de 10 años con la doctora Rodríguez, fue otra especialista que con ojos llorosos sostuvo que “era una guerrera. Todo proyecto para ella se podía hacer. Nada era imposible. Le encantaba lo que hacía y su pasión era curar los pacientes”.

    Otra científica que destacó la labor de la doctora Maribel Rodríguez lo fue la doctora Ivonne Jiménez, pionera en Puerto Rico en avances y desarrollo de medicamentos contra el Alzheimer.

    “Era una mujer muy emprendedora que logró desarrollar una Fundación de Investigación clínica de primera calidad. Nunca se limitó sólo a la gastroenterología. Aportó al avances de otras enfermedades. Su perseverancia será un gran legado para nosotros”, resaltó.

    Igualmente concordó el doctor Rodríguez Orengo, catedrático del Departamento de Bioquímica del RCM que laboró mano a mano con la doctora Rodríguez desde el 1999.

    El científico, parte también de la Junta Directiva de la Fundación de Investigación, catalogó a la especialista como una científica y ser humano “excepcional”.

    “Su mayor legado fue dejar un centro de investigación de primera categoría a nivel mundial donde podemos hacer ya estudios Fase 1 y Fase 2 y reconocido entre las industrias farmacéuticas”, enfatizó.

    Se espera que la doctora Eileen Pacheco, hematóloga oncóloga, ocupe el cargo interinamente la presidencia de la Fundación de Investigación en lo que confirman la presidencia del centro investigativo oficialmente.

    La gastroenteróloga fue autora de sobre 150 artículos científicos a nivel mundial y gracias a su gesta médica y clínica, más de 15 medicamentos para curar la Hepatitis C fueron aprobados por la Administración Federal de Drogas y Alimentos (FDA).

    Un día antes de su deceso, la autoridad médica que presidió la Fundación de Investigación de Puerto Rico hace 15 años, se comunicó con una colega de la industria farmacéutica y mediante un mensaje le expresó su alegría de pasar la época navideña en un lugar de paz, lejos de conflictos y donde sus ciudadanos gustaban de ayudar y compartir en familia.

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